La estación de metro València Sud suspende en accesibilidad
Valencia y su área metropolitana presenta notables carencias en el transporte público. A la falta de aparcamientos disuasorios se une la inaccesibilidad.
El metro es uno de los medios de transporte más rápidos y cómodos para desplazarse por la ciudad de Valencia y entre los municipios más cercanos a ella. Pero ¿para quién? Para cumplir con su objetivo, es imprescindible que sea accesible a todas las personas, tal como recoge el Plan de Accesibilidad Universal de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana.
Si la red de Metrovalencia, compuesta por 133 estaciones y paradas distribuidas en 146 kilómetros, no es accesible en su totalidad, es porque, precisamente, en Valencia Sud (situada en la Línea 1, en el distrito de Pobles del Sud, en la pedanía de Faitanar) es aún la gran olvidada, a pesar de que es la de mayor longitud y estaciones y la más antigua de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), y a pesar de que por ella pasan 130.000 usuarios, muchos de ellos para acudir diariamente al trabajo a localidades como Torrente, Picassent, Alginet, Carlet, Benimodo o L’Alcúdia.
València Sud carece, en estos momentos, de un ascensor que permita el acceso total a las personas con movilidad reducida a los andenes de las líneas 1, 2 y 7. Además, no cuenta aún con plataformas que salven la distancia entre metro y andén, con el fin de que las sillas de ruedas puedan subir bien a los coches y se garantice la seguridad de estas personas. De hecho, según el Plan de Accesibilidad Universal FGV, en su sección 7ª, esta mejora se va a implantar este año 2018 en las estaciones de Seminari – CEU, Moncada – Alfara, Burjassot-Godella, Sant Isidre, Picanya, Picassent, Carlet, La Pobla de Vallbona, Massamagrell y Bailén; pero no tiene fecha aún para la estación de València Sud.
Y, por último, tampoco se ha previsto para esta estación ningún plan de compra e instalación de pantallas informativas en la superficie de la estación que informen de las salidas y llegadas de trenes con teleindicadores que dispongan de un sistema de síntesis de voz, útiles tanto para personas sordomudas como invidentes.
Cuando se le pregunta a Ferrocarrils de la Generalitat sobre este asunto, comenta al respecto que “València Sud necesita ser adaptada dentro de sus posibilidades estructurales porque esta estación tiene algunos elementos que permiten la accesibilidad sólo parcial, como rampas, interfono, máquina autoventa con locución, teleindicadores, megafonía y señalización de línea amarilla de peligro en los andenes”.
Asimismo, argumenta que “el problema de esta estación es de acceso físico y tránsito entre sus andenes y es necesario un estudio de viabilidad para la implantación de determinadas estructuras que faciliten su accesibilidad global, tanto por lo que significa dentro de la red, como por la intermodalidad planteada con el parking adyacente”. En cualquier caso, en la estación es urgente también la iluminación interior del paso inferior entre andenes, pero esta tampoco se ha realizado todavía.
220.000 € solo para mejoras del acceso desde el aparcamiento
Hace unos días, FGV anunció que acometerá este año 2018 una serie de obras en esta estación. Sin embargo, no se trata de infraestructuras encaminadas a hacer más fácil el acceso a personas con movilidad reducida, sino de obras de cerramiento del complejo de València Sud, en el que coexisten zonas de acceso público, como la estación de viajeros de las líneas 1, 2 y 7 de Metrovalencia, con zonas de acceso restringido, como los edificios de oficinas y los talleres.
Una inversión de 220.445 euros, IVA incluido, tiene como objetivo limitar dichos espacios públicos y privados y ordenar el flujo de viajeros que acceden a la estación de València Sud desde el aparcamiento que Metrovalencia facilita de manera gratuita a sus usuarios, según ha informado Ferrocarrils en un comunicado.
De esta forma, se habilitará un paso al salir del aparcamiento para que los usuarios no tengan que atravesar las barreras e introducirse en la zona privada del edificio y puedan acceder a los andenes, a través de una rampa y una escalera.
Asimismo, se dotará a dicha estación de viajeros de un control de accesos a los andenes, en los que se instalarán dos pasos de validación, marquesinas y equipamiento de seguridad y atención al cliente, como cámaras e interfonos. Esta actuación conllevará desplazar de lugar la actual máquina de venta de títulos de transporte.
Las obras están previstas que se inicien después de Fallas, dado que, durante estas fiestas, el aparcamiento de València Sud experimenta un gran movimiento de entrada y salida de vehículos privados de todas aquellas personas que combinan el coche con el metro para acudir a los actos festivos en la capital, como las mascletás, y este se puede ver entorpecido por las obras, que durarán aproximadamente seis meses.
COCEMFE y CERMI siguen trabajando por las mejoras
Desde la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) en Valencia y el Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad Valenciana (CERMI), la falta de adaptación de entornos y servicios en la estación de València Sud es una cuestión por la que se está trabajando desde el Plan de Accesibilidad Universal de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana, de la que ambas forman parte.
Según estas entidades, “es cierto que se sigue trabajando por las mejoras, pero esta estación nunca ha sido prioridad porque desde Ferrocarrils siempre nos han dicho que es casi imposible, incluso, poner un ascensor, como ocurre en el caso de la estación de Torrent”, comenta Vicente Gascón miembro de la Comisión de Accesibilidad de COCEMFE Valencia. Para Gascón, "a València Sud es casi imposible acceder si no vas acompañado siempre de alguien y es preferible, antes que coger el metro, moverse con un coche o una furgoneta adaptada; algo que, por otra parte, no todas las personas con movilidad reducida pueden tener".
Lo importante es, según ambas asociaciones, “que se vaya haciendo una hoja de ruta para garantizar un transporte público, basado en criterios de igualdad, dignidad, máxima autonomía, comodidad y seguridad, pero hay veces que nosotros proponemos las actuaciones en determinadas estaciones y FGV ejecuta otras”. Algo que para los responsables de Ferrocarrils sucede a la inversa, “muchas veces queremos priorizar ciertas mejoras de accesibilidad en unas estaciones en las que no actuamos desde hace tiempo, pero los colectivos nos proponen otras porque han de dar cobertura a determinadas zonas en las que tienen un número de asociados mayor”.
En cualquier caso, la exclusión que sufren las personas con movilidad reducida en València Sud depende de que se hagan unos entornos inclusivos que nunca llegan. Las personas con discapacidad "tienen los mismos derechos que las demás y en València Sud se necesitan ajustes razonables para evitar cualquier tipo de discriminación", comentan desde CERMI y COCEMFE.