Valencia CF3-Levante UD1: El Valencia CF se alía con Medié Jiménez para doblegar

El derbi comenzaba con ritmo, vibrante por momentos. Prueba de ello es el 1-1 que reflejaba el marcador a los 18 minutos. Primero fue la conexión Parejo-Santi Mina tras saque de esquina (tercer tanto ya de esta factura en lo que va de segunda vuelta) la que abriría el tanteador tras impecable remate del atacante gallego; a lo que el Levante UD sería capaz de responder (tan solo minuto y medio después) de manera muy similar; en este caso Campaña habilitaba para que el central Sergio Postigo tocara con calidad poniendo el esférico fuera del alcance de Neto.

Hasta ese momento el encuentro era más atractivo para el espectador que, con toda seguridad, para ambos técnicos. Sin embargo, en el segundo "cuarto" del choque, la manija del mismo empezó a tomar claro cariz blanquinegro debido, en mayor medida, a la sucesión de progresiones con peligro por banda que encadenaban unos activos Soler y Gayá. Precisamente tras centro de éste último, Santi Mina tuvo una inmejorable ocasión, repelida por el travesaño, de hacer el 2-1 instantes antes del entreacto.

No obstante, el Levante UD, de forma progresiva, iba a ser capaz de irse asentando sobre el césped de Mestalla. En realidad para el fatídico minuto 63 ya lo estaba. Pero lo que no podrían prever los granotas, de ninguna de las maneras, es que estarían inhabilitados para luchar contra el factor diferencial del encuentro.

Y es que, en los hombres de Marcelino ya se empezaba a atisbar el cansancio acumulado del pasado jueves, cuando Coke remataba a gol, por tercera vez en el encuentro un saque de esquina, si bien éste sería diferente... Medié Jiménez había decidido no concederlo aludiendo a un empujón previo de ¡Gabriel sobre Gayá! Acto seguido, con unos jugadores granotas todavía descentrados y enfrascados en protestas, Vietto acabaría por aprovechar una muy buena jugada personal de Carlos Soler y los sucesivos rechaces que ésta produjo.

Habíamos pasado del 1-2 al 2-1 en un instante ante la incredulidad generalizada reinante en Mestalla. A partir de ahí, el Valencia pudo, a favor de obra, manejar el duelo a su antojo frente a unos nerviosos levantinistas, y Kondogbia y Santi Mina por dos veces (Oier y el palo lo impidieron) tuvieron la sentencia definitiva en sus botas.

Pero aún habría más; cuando el debutante colegiado catalán convertiría en el último minuto una perfecta anticipación de Róber sobre Zaza en... ¡penalti!, regalo que Dani Parejo no iba a desaprovechar desde los once metros.

Tras el partido final, el Valencia CF lograba tres valiosos puntos que le consolidan en puestos de Champions, máxime tras el inesperado tropiezo de su máximo perseguidor, el Villarreal, en esta jornada.

Por otra parte, el Levante UD, - el cual esta vez ha sido receptor de un castigo tan desproporcionado como injusto a partes iguales- deberá seguir remando en aras de que el fútbol (eso sí, sólo el fútbol) le devuelva lo que un trencilla con vocación de prestidigitador, en una noche aciaga y de forma cruel, le sustrajo.