Les Corts rechaza la financiación estable para cinco entidades sociales
Los populares querían que se garantizara la financiación a Cáritas Diocesana, Cruz Roja, Cermi, Domis Pacis-Casal de la Pau y la Asociación Valenciana de la Caridad.
El tripartito ha rechazado la propuesta de instancia al Consell en ese sentido alegando que sólo serían cinco las beneficiadas y que ahora reciben más dinero que cuando gobernaba el PP. Ciudadanos, según su costumbre, se ha abstenido.
La iniciativa del PP la ha defendido María José Catalá que ha destacado lo “esencial” de la labor de esas instituciones para llegar a donde no llega la Administración. Catalá se ha quejado de lo que tarda en llegar el dinero a sus destinatarios (la Asociación Valenciana de la Caridad obtuvo la resolución de las de 2017 en diciembre de ese año) por la vía actual. La diputada popular también ha señalado el agravio comparativo que se crea con la financiación estable que sí se le da a asociaciones como el Institut Ramon Llull o a la Fundación Baltasar Garzón. La primera se dedica al fomento de la lengua catalana, y la segunda lleva el nombre del exjuez condenado por prevaricación por unanimidad de los jueces del Supremo que vieron su caso.
Desde el tripartito le han llovido las críticas a Catalá, fundamentalmente porque sólo quiera estabilizar a esas cinco asociaciones (Podemos ha llegado a decir que le recordaba a los métodos de Rafael Blasco), pero también porque varias de ellas ahora ingresan más de la Administración que cuando la gobernaba el PP.
En esta última crítica también ha coincidido Ciudadanos, que ha resaltado que a Cáritas se le ha dado en 2017 el doble que la línea nominativa cuando gobernaba el PP. Ciudadanos -que finalmente se ha abstenido- también ha criticado por boca de Rosa García que actualmente las ayudas se publiquen a mitad de año, lo que obliga a las asociaciones a hacer “un gran esfuerzo”.
Catalá le ha reprochado a su vez a la diputada de Ciudadanos “incoherencia” respecto de las decisiones en esta materia que su partido adopta a nivel estatal, en donde sí se valora la modalidad de ayudas vía convenio.
Mónica Álvaro, de Compromís, ha sido la más dura con Catalá: le ha acusado de “mentir” porque ahora hay más ayudas para las asociaciones mencionadas. La socialista Rosa Mustafá, en parecidos términos, ha añadido que “ustedes preferían destinar a otras cuestiones como la Fórmula 1” y ha defendido que la concurrencia competitiva da la oportunidad a la Administración de escoger “la mejor opción” en “igualdad de condiciones” y sin “amiguismos”.
Catalá ha reconocido que no le parece “mal” que ahora se tenga que acceder a las ayudas mediante concurrencia competitiva, aunque otras comunidades autónomas tienen líneas normativas y “no pasa nada”.