Juan Roig cede ante València en Comú para tener su Valencia Arena
La concesión de suelo público por parte del Ayuntamiento a 50 años permitirá la celebración de grandes eventos antes de 2021.
Finalmente, el empresario de Mercadona y dueño de Valencia Basket Juan Roig ha terminado por aceptar la condición indispensable que Valencia en Comú, a través de María Oliver - su portavoz municipal y posible candidata a las próximas elecciones en el Cap i Casal - había impuesto.
Si bien el magnate valenciano apostaba, en un primer momento, por la compra del terreno público que, en su día, parecía destinado a la instalación de la Torre de la Música, poco después y con gran celeridad, la propia María Oliver se apresuró a defender la postura de su grupo municipal, el mismo que ejerce como confluencia de Podemos: únicamente resultaba viable para ellos la fórmula de la concesión.
Postura, esta última, que ha terminado por erigirse en la más satisfactoria para ambas partes. Por un lado, el consistorio no perdía la propiedad del suelo público, mientras que por otro el Valencia Basket podría disfrutar de su nueva instalación en un espacio temporal mucho más breve, siendo ésta una consideración determinante dada la voluntad de Juan Roig de que el nuevo recinto esté listo para acoger la Copa del Rey en febrero de 2021.
Pero aún hay más: los parámetros económicos de la operación también dan la impresión de poder devenir en otro aspecto favorable para el propio Roig, cuanto menos, en comparación con una hipotética venta que ya, a buen seguro, no se va a producir.
Con todos estos datos en la mano, el cambio de tornas en lo que a la decisión final se refiere cabe ser considerado como, en cierta medida, exitoso por parte de una plataforma como la de València en Comú, la cual se ha venido, en los últimos tiempos, caracterizando por la pretensión de marcar distancias en ciertas cuestiones - fundamentalmente las relativas a los grandes proyectos de la ciudad - con sus socios en el seno del Govern de la Nau en pos de su propio rédito electoral. En este caso, la rápida reacción positiva del PSPV e, incluso, el provocar que Compromís dejara atrás sus reticencias iniciales, suponen algo atribuible en su haber.
Así pues, el Ayuntamiento establecerá un canon anual, como ya se acordó dentro del plan de negocio presentado este miércoles, y que figuraba como último trámite para la elaboración de un proyecto que ya apunta a realidad. El Valencia Arena será un hecho y, con ello, la ciudad del Turia volverá a situarse en el mapa de la organización de los grandes eventos nacionales e internacionales. Juan Roig lo tiene claro: el magnífico O2 de Berlín es el paradigma de instalación moderna y polifuncional en cuyo arquetipo ya llevan un tiempo trabajando sus colaboradores de confianza. Un recinto con aforo para 17.000 personas y que, a la vez, destaca por su gran belleza estética.
Los grandes proyectos con los que Valencia en Comú marca distancias con sus socios
La voluntad de la confluencia de Podemos de desmarcarse dentro del gobierno municipal de Valencia, buscando un espacio electoral propio y, a su vez, la de adquirir la visibilidad que el hecho de disociarse en determinados asuntos de sus dos compañeros de viaje en el consistorio le da, quedan claras. La cita electoral que dentro de poco más de un año viviremos obliga a la formación a un giro en sus posiciones, y máxime desde la tempestuosa situación que desembocara en la dimisión de su, hasta entonces, líder municipal Jordi Peris allá por el pasado mes de julio, y fruto de una clara crisis interna.
A continuación, citamos otras de las últimas "fuentes de conflicto" de Valencia en Comú con sus actuales socios del Govern de la Nau, siempre a cuenta de los grandes proyectos, y al margen del nuevo pabellón:
Ampliación de la V-21: Si bien era éste un proyecto que no convencía en su totalidad a ninguno de los integrantes del Govern de la Nau; Valencia en Comú mostró la postura más beligerante, incluso no aceptando el plan alternativo que el alcalde Joan Ribó llegó a proponer como solución intermedia.
Universidad Europea: En este caso, la actuación de la plataforma adscrita a Podemos, en forma de negativa a la propuesta de permuta de suelo público en el Cabanyal, sí consiguió bloquear las negociaciones e ir, progresivamente, alejando el proyecto de su idea inicial.
Torres en el Parque Central: El propio Joan Ribó ha sido quien ha advertido, en esta ocasión, a la marca valenciana de la formación morada, alegando que la proposición en torno a las torres lleva ya más de 10 años aprobada, y que el impacto medioambiental que supone resultará, prácticamente, nulo.