El Levante UD continúa mimetizado con las buenas costumbres
CD Leganés 0 - Levante UD 3. Los perfectos segundos 45 minutos realizados en tierras "pepineras", otra muesca más en el inagotable revólver del conjunto de Paco López.
Último tercio de liga. Acostumbraba a hablar el inolvidable Luis Aragonés de dicho tramo de la competición como aquel en el que los equipos podían alcanzar sus objetivos siempre y cuando estuvieran medianamente bien colocados para ello. Pues bien, los últimos nueve partidos disputados - restan tan sólo dos- por el Levante UD arrojan el fantástico balance de 22 puntos logrados de los 27 en disputa. Ni el brillantísimo campeón FC Barcelona puede presentar unos números similares.
El propio "Sabio de Hortaleza" también, por otro lado, acuñó aquello de que todo esto consiste en "ganar, ganar y volver a ganar". Algo que parece haberse convertido en rutina durante los últimos tiempos en Orriols. Y bendita rutina, por supuesto.
Primer tiempo "desapacible" y falto de ritmo: el CD Leganés manejaba el esférico - eso sí, escaso de profundidad - en un primer acto marcado por las adversas condiciones atmosféricas. Oier se vio obligado a sacar una mano providencial a disparo de Amrabat en la única opción clara de los locales.
Mientras tanto, las coberturas de Rubén Pérez - frecuentemente mediante faltas tácticas - conseguían aplazar el torrente ofensivo que produce José Luis Morales a través de sus cabalgadas. Y es que pocos de los asistentes al estadio de Butarque imaginaban que la tormenta meteorológica acabaría por convertirse en otra, aún de mucha mayor intensidad, conformada por el juego y los goles visitantes.
Los tres goleadores, tres "joyas" que ejemplifican la metamorfosis granota:
Primero fue el propio Morales (min. 54), quien aprovechó por medio de un disparo clásico de "killer" del área una perfecta combinación entre Bardhi y Jason para dejar atrás a David Barral, convirtiéndose de esta manera en el máximo anotador de la historia del Levante en Primera División (19 tantos).
El "Comandante", lejos de conformarse con la ventaja que había establecido en el marcador, logró forzar poco después de una tacada la expulsión del defensor local Zaldúa y, lo que es más importante, la acción idónea a balón parado para un Enis Bardhi que únicamente tenía que golpear el balón como sólo él sabe para poner el 0-2. El macedonio devolvió la gentileza para conseguir su quinto tanto de falta directa, situándose así en la cúspide mundial de esta nada desdeñable faceta del juego.
Y quedaba el 0-3 (min. 77) que no podía ser para otro que Coke Andújar. Desde cualquiera de los dos laterales, el madrileño ha contribuido decisivamente a cambiar la dinámica del equipo, no sólo a través de su carácter ganador, sino también con sus goles (ya lleva tres).
La última de las claves pasa, una vez más, por ponderar la magnífica labor de Paco López, pero eso ya será producto de un análisis mucho más pormenorizado. Sin duda, lo merece. Gracias Paco!