Noche de compras

Hay tres tipos de personas en este mundo: las que adoramos ir de compras, las que lo ven como obligación y las que directamente no entienden el concepto. El primero se pasa la vida de probador en probador. Compran, llegan a casa, se prueban y lo devuelven el 70% de las veces. El segundo tipo son aquellas personas que se agobian con la gente, las colas y las tallas. Prefieren ir a casa de su amiga y vestirse con su armario. El tercero es mi padre, que defiende que solo cuando necesitas algo concreto tienes que ir a por ese algo, por lo que “ir de compras” no debería existir.

Bien, pues seas del tipo que seas el jueves acabaste en la Shopening Nigh. Ya sea porque fuiste de los pocos afortunados que terminaron exámenes o porque es tradición sagrada con tu grupo de amigas y no vas a ser tú quién falle. Además, pocas veces se consigue ir de compras todas juntas, por eso de que unas se tiran cuatro horas en una tienda y otras se aburren a los dos minutos…. La Shopening Night tiene para todos, porque además de rebajas (entre el 5% y el 20%) tienen chuches y bebidas para que el segundo grupo aguante más. Incluso el tercero se ha rendido y ha venido a pasar la tarjeta de crédito…

Después de cenar a base de gominolas y cervezas y cuando los pies no dan para más, sacas fuerzas y paras en cualquiera de los escenarios que hay repartidos por todo el centro de Valencia: Plaza del Ayuntamiento, C/Jorge Juan y Hernán Cortés con Ciril Amorós. A las 22 h ya no se podía ni caminar por al lado del Mercado de Colón, donde, entre toda la gente en frente del escenario y las colas para la barra era difícil encontrar a tus amigos de nuevo. En la plaza del Ayuntamiento también se lio una buena, ya que estuvo organizado por Movistar y el Festival de les Arts, que además de la música, ofertas y degustaciones, sortearon dos entradas para el festival de este fin de semana. Qué pena que no tocase porque la cartelera de este año ha sido increíble…Pero bueno, ya el año que viene.

Todo esto hace que la Shopening Night, que se celebra dos vece al año, sea no solo una noche de compras, sino un evento que todos los públicos pueden disfrutar, donde el centro de Valencia se llena de vida y luces. Sobre todo la primera del año, la que se celebra en estas fechas, cuando te compras el primer bañador y sabes que el verano por fin ha llegado y con él, todos los festivales que tenemos la suerte de tener en nuestra misma ciudad.

Después de esta motivación de que el verano está aquí, ¡A por los últimos exámenes! A ver si así podemos estrenar por fin todo lo que compramos el jueves pasado…