Ximo Puig y Mónica Oltra miran de reojo a Pedro Sánchez y Quim Torra
La Generalitat vigilará que no haya privilegios para Cataluña, en tanto el senador Mulet insiste en que la comparecencia de Puig para hablar de infrafinanciación en la Cámara Alta ya no está “registrada”.
La actualidad ha querido que coincidan en el tiempo dos asuntos relacionados con los agravios que sufre la Comunidad Valenciana.
Uno de ellos surge como consecuencia de la audiencia concedida por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al presidente catalán, Quim Torra. Preguntados por las consecuencias que de esos reanudados contactos institucionales se puedan derivar para la Comunidad, los máximos responsables de la autonomía valenciana han mostrado un cierto grado de recelo.
Ximo Puig ha proclamado una vez más que "el diálogo y la ruptura del hielo siempre es positivo para el conjunto de España" pero puntualizado que "nosotros en ningún caso vamos a aceptar ningún privilegio de nadie porque el problema territorial en España no es solo Cataluña porque hay un problema grave de infrafinanciación y de asimetrías que representan anomalías en el sistema".
En muy parecidos términos se ha manifestado Mónica Oltra, para quien el diálogo "siempre es una buena noticia". La vicepresidenta ha añadido que el Consell "siempre" ha mantenido que "cualquier acuerdo que se alcance no puede ser a costa de los intereses de los valencianos, que en la actual configuración territorial, somos la comunidad peor financiada de España y que siempre hemos estado en la cola de las inversiones en los Presupuestos Generales del Estado".
¿Irá Puig al Senado a defender la financiación justa ahora que gobierna el PSOE?
Todo lo anterior nos lleva al otro asunto vivo vinculado a los agravios: la defensa de la reforma del sistema de financiación que el presidente Puig iba (o va) a hacer en el Senado.
Tras el cambio de Gobierno, con un Pedro Sánchez que ha renunciado a modificar la financiación autonómica en esta legislatura, se esperaba con impaciencia el momento en que Puig acudiera al Senado a defender lo que había pedido poder hacer en la Cámara Alta cuando quien gobernaba era el PP. El representante de Compromís, Carles Mulet, harto de esperar, pedía este lunes la comparecencia alternativa de la secretaria autonómica de Hacienda, Clara Ferrando. La crítica implícita de Mulet molestó mucho a los socialistas.
De hecho este martes el propio Puig reafirmaba su intención de comparecer: "he pedido la comparecencia y me gustaría que tanto Mulet como todos los senadores nos ayudaran, aunque no son ellos los que determinan esto, sino el que gobierna el Senado que es el PP y es el que no deja comparecer al presidente de la Generalitat en un ejercicio de una enorme irresponsabilidad".
Es decir, la culpa de que no haya comparecido es del PP. Sin embargo Mulet, en un comunicado también del martes, ha reiterado que la intervención de Puig "no está ya entre las registradas en el Senado" y se ha preguntado "cómo es posible después de tanto esfuerzo" y "siendo tan consciente de la necesidad de modificar cuanto antes el sistema de financiación autonómico".
Precisamente desde el PP, su portavoz de Economía en Les Corts, Rubén Ibáñez, ha afirmado que Ximo Puig, "ha traicionado a los valencianos al anteponer el servilismo a (Pedro) Sánchez a los intereses de la Comunitat". Ibáñez ha señalado que "la retirada de la solicitud de Puig para comparecer en el Senado sobre la necesidad de reformar el sistema de financiación es una vergüenza". "Demuestra que la batalla por la financiación era partidista".