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Feminismo mal entendido

Seamos consecuentes, con tanta propaganda de “querer estar por encima” no nos hacemos ningún favor. Los hombres también son feministas.

Feminismo mal entendido

Publicado por
Mª Carmen Pérez Antón *

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El otro día mis amigos que estaban de vacaciones entraron a una tienda donde se imprimían camisetas y en la que se vendían modelos varios y colores de todas clases, querían comprar una camiseta con un motivo feminista, con una frase reivindicativa pero la respuesta del vendedor les dejó atónitos: “Lo siento pero nosotros no tenemos nada que ver con la política".

Mis amigos salieron con cara de estupefacción y sin entender nada… o tal vez no entendió el significado del concepto de feminista… que la palabra, muy posiblemente, diera un significado a esa persona distinta, o estaba muy mal entendida, mal usada y que a estas alturas de la película se encontraran con semejante respuesta les dio mucho que pensar.

¿Defender un ideal honorable y digno es política?

Feminismo es un concepto que se creó como movimiento de la mujer para buscar la igualdad con el hombre, nada más… gracias a esta acepción se han conseguido grandes avances para la mujer en todos los aspectos de la vida, derecho al trabajo, al voto femenino, a la educación a toda participación del ser humano, donde las mujeres somos de tanta importancia en el mundo que nos rodea como lo es el hombre…

Pero todo por y para conseguir la ansiada igualdad, como seres capaces de afrontar cualquier problema e inclusive prosperar en cuestiones evolutivas… ¿Por qué no?

Feminismo es igualdad entre el hombre y la mujer, nadie es más que nadie ni menos tampoco, no entiende de géneros, entiende de personas. Con ello no queremos decir que los hombres desaparezcan del mundo, o que pasen a una segunda o tercera fase, no somos “amazonas”, somos personas que con las mismas capacidades que el hombre queremos competir por aquellos puestos que siempre nos negaron por el simple hecho de ser mujeres, sin que se vieran o reconocieran grandes capacidades, destrezas, habilidades, o conocimientos que sin duda pueden poner a esa persona en el puesto y defenderlo horadamente.

Nunca defenderemos que los hombres no asistan a reuniones feministas. Aceptamos a cualquier ser humano honorable con el que se puede discutir razonablemente los conceptos, y mejorarlos. Se trata de positividad y de trabajo en equipo. No poseemos campos de fuerza invisibles para que los hombres no se acerquen. Obviamente no queremos saber nada de aquellos sociópatas que ven a las mujeres como seres inferiores. La evolución pronto pondrá a estos energúmenos en su sitio.

Para mí un ejemplo maravilloso fue cuando otros de mis amigos, que acaban de tener un bebé, han decidido poner el primer apellido del niño el de la madre, ¿por qué? Porque la ley ya lo permite, porque ya no hay distinciones y porque han demostrado que los prejuicios están en las cabezas, ¡enhorabuena a esas personas!...

Por supuesto, aquí pasa como en todos los sitios y movimientos. Hay mujeres que se quejan del machismo y sin embargo están haciendo lo mismo pero a la inversa, necesitan demostrar la superioridad de la mujer sobre el hombre, se hacen llamar feministas (que también somos el resto…), pero es un concepto mal entendido y mal aplicado, hacen tanto ruido negativo, que en vez de favorecer la igualdad y trabajar en pos de una meta en común están consiguiendo el efecto contrario, una brecha cada vez más grande entre ambos géneros, porque el ciudadano de a pie, se queda con ese ruido, feminismo son las mujeres que van en contra de los hombres, claro, a mi que no me metan en ese saco, ¿feministas? No, somos todas unas radicales… y ese es el pensamiento generalizado que se queda.

Claro que poco aportan los medios de comunicación, que por vender un producto se apuntan a un bombardeo sin mirar siquiera si es acertado o no el mensaje, ¿vende? ¡Pues adelante! No se dan cuenta de que las mujeres no necesitamos demostrar en un spot publicitario que podemos hacer lo que nos dé la gana, igual que los hombres, ¿dónde está el problema?

Pero con tanta propaganda de “querer estar por encima” no nos hacemos ningún favor. La igualdad empieza por el respeto de todas las personas y del reconocimiento del talento… y sinceramente o se nace con talento, o no se tiene. Una persona que destaca en una materia es obvio que sobresale de lo que es normal, y puede ser hombre y también mujer… ¿Qué defendemos?... Que si ese talento nace de un mujer llegue donde se merece y que no sufra arbitrariedades por el hecho de ser mujer.

Así que por favor, seamos consecuentes, si somos iguales… sobran todas estas cosas, los hombres también son feministas, porque creen que son iguales que ellas porque en unas actividades ellos son mejores, en otras son ellas, como he dicho antes, no es por el género, realmente son los individuos los que destacan en una actividad, y el penacho, la brillantez, son necesarios en la vida para mejorar la sociedad…

Afortunadamente, poco a poco vamos viendo como nuestras científicas, músicas, jefas, presidentas, astronautas y todo tipo de profesiones la parte que aportan las mujeres es necesaria para afrontar grandes proyectos y mejora de futuro.

La inteligencia emocional de Goleman habla de personas. Los sentimientos, el conocimiento de ellos es importante en nuestra sociedad.

No debemos de tirarnos piedras a nuestro tejado, la polémica está servida si no somos razonables, que lo somos. ¿Quién sabe más de emociones que las mujeres?...

Feminismo es igualdad, no pertenece a ningún partido político, ni ideología, creencias, pensamientos, ni nada por el estilo, no es una hortera secta, es una cuestión de una sociedad mejor organizada, y demuestra una cultura profunda e inteligente, pero si el estandarte ideológico lleva todo esto del feminismo como escudo, entonces se puede enturbiar el sentido del feminismo por otros ideales que nada tienen que ver con la igualdad.

¡Viva los seres humanos!

*Grupo EmeDDona.

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