¿Quién ganará las elecciones en Singleland: Transmuta o Certeza?

Singleland afronta unas reñidas elecciones presidenciales. Con desconfianza popular en sus dirigentes, altas tasas de paro y de inseguridad ciudadana, el partido gobernante en las tres últimas legislaturas, de corte socialdemócrata, ha quedado fuera de la competición en la primera vuelta. Transmuta, con apenas seis años de vida, de cariz progresista y defensor del cambio; y Certeza, ocho décadas de historia, de tinte conservador y con experiencia de gobierno, compiten por dirigir esta nación…imaginaria. Como los propios partidos.

En cambio, la competición sí existe. Se desarrolla esta semana dentro de la Cápsula Electoral organizada en Valencia por Gobernatia, Escuela de Liderazgo y Alto Gobierno, en Capitol Empresa. El alumnado, configurado por concejales y cargos de partidos tan diversos como Ciudadanos, PSOE, PP o Podemos, estudiantes, consultores o por funcionarias independientes, procede de diferentes puntos de España y de países como Argentina o Perú. No obstante, el origen constituye un factor secundario cuando se trata de aunar fuerzas, como en este caso, para ganar las elecciones en Singleland.

Divididos en los dos partidos citados, disponen de una semana para lograrlo. Sin conocerse, han de orquestar y armonizar un equipo y edificar su estrategia de campaña, construir su relato, detectar e insistir en sus puntos fuertes y reforzar los débiles, diseñar su imagen, elaborar su lema, participar en tertulias de radio y televisión, realizar sus vídeos divulgativos, debatir y un largo etcétera de actividades destinadas a ese único objetivo: convencer al electorado y, como consecuencia, ganar las elecciones.

Mientras, van nutriéndose de la experiencia y de los consejos que les trasladan en sus ponencias diferentes expertos en comunicación, marketing, liderazgo, oratoria, participación o marca personal. Recopilan información y, de manera paralela, van puliendo su estrategia. El tiempo apremia y solamente puede ganar un equipo/partido.

El escenario se complica porque cada alumno debe dejar a un lado sus creencias personales y asumir la ideología de un partido ficticio que puede coincidir en poco o nada (como así sucede en la mayoría de los casos y a propósito) con las suyas propias. Se trata de ponerse en la piel del rival, de interiorizar sus mensajes para refutarlos.

En la práctica, la cápsula electoral supone un entrenamiento de primera magnitud para dirigentes políticos que dentro de unos meses, en mayo de 2019, afrontarán campañas reales, sin margen de error. Por cierto, el resultado de las elecciones en Singleland se sabrá este sábado.