La consellera Ana Barceló levanta el cordón sanitario a una concesión
Estamos ante un hito del gobierno de Botánico. Por primera vez desde que gobierna la izquierda valenciana un conseller se ha acercado a un acto organizado por una concesión hospitalaria.
El acontecimiento planetario ha tenido lugar en Elche, organizado por el Hospital del Vinalopó, a su vez gestionado por el grupo Ribera Salud. La consellera Ana Barceló inauguró la jornada “La muerte y el morir”, e incluyó el acto en su agenda oficial, eso sí, sin especificar quién lo organizaba.
Durante todo el mandato de su antecesora, la recordada Carmen Montón rehuyó cualquier contacto y visita a los hospitales públicos de gestión privada (salvo Denia, pero porque había “lío” con los alcaldes de la zona), aunque no a los centros totalmente privados o totalmente públicos. Montón y Barceló participan del dogma de la reversión a toda costa de las concesiones a pesar de los reiterados informes del Síndic de Comptes que aseguran que ese tipo de gestión ahorra dinero a los valencianos. Para Manises se calculó un 25% y para Torrevieja un 30%.
Precisamente en Torrevieja el portavoz popular José Manuel Dolón ha impulsado una moción para que el Ayuntamiento manifieste “el valor extraordinario del Hospital Universitario de Torrevieja como elemento imprescindible para garantizar la calidad de vida de todos los vecinos, así como de todos y cada uno de los profesionales que lo integran, que son los grandes artífices de los éxitos del mencionado Hospital”. Recuérdese que en el caso del ya revertido Hospital de Alzira las mociones municipales de los pueblos de La Ribera iban justo en el sentido contrario.
Torrevieja es el tercero en la lista de fechas de caducidad de las concesiones, tras el ya revertido caso de Alzira y el próximo objetivo del Consell, que es el departamento de La Marina (Denia). Torrevieja, pese a sus éxitos, no tiene garantizada la continuidad de sus gestores. Denia, pese a la voluntad del Consell, no tiene garantizada su reversión al 100% precisamente porque Ribera Salud es accionista -aunque minoritario- también en este caso. Hay conversaciones pendientes.