Los médicos valencianos, en manos de los abogados

Las agresiones a médicos valencianos del sistema público han sido 21 en lo que llevamos de 2018, sólo 3 menos que en todo 2017, año en el que ya se registró un aumento del 55% respecto a los dos anteriores, cuando los facultativos aún no eran “autoridad”. El objetivo ahora es que también sean consideradas “atentado contra una autoridad” la agresión verbal y las agresiones en el ámbito de la medicina privada.

En paralelo, también ha aumentado el número de las reclamaciones por negligencias médicas y la cuantía de lo reclamado en las mismas. En muchas ocasiones, el profesional opta por llegar a un acuerdo que le evite la “pena de banquillo” durante años, pese a la inexistencia de responsabilidades, según la presidenta del colegio oficial valenciano (ICOMV) Mercedes Hurtado. Las especialidades más reclamadas son Neurocirugía, Ginecología, y Obstetricia, Anestesia, y Urgencias.

Hurtado ha alertado de las consecuencias de estas situaciones, con especial énfasis en la saturación de la Justicia y el aumento de la llamada “medicina defensiva”, que consiste en hacer más pruebas de las necesarias para que el médico pueda curarse en salud. Se calcula que más del 30% del gasto sanitario se destina a la “medicina defensiva”.

Balance del año

En su tradicional balance del año, Hurtado ha destacado del ejercicio que ahora concluye la puesta en marcha del presupuesto participativo y el Servicio de Orientación Jurídica en Extranjería, Nacionalidad y Protección Internacional, y la creación de la Oficina de la Mujer Médica, con la que se pretende “impulsar y facilitar el pleno desarrollo de las mujeres médicas”. Paradójicamente las mujeres (7.716) superan a los hombres (7.396) en la colegiación de los médicos valencianos en una clara “feminización” de la profesión, según Hurtado. Por especialidades, las mujeres sólo son mayoría aplastante en Pediatría, y los hombres sólo en Urología.