J. A. Ramírez: "Traemos a Valencia la magia del concierto de Año Nuevo de Viena"
Viena se traslada al Palau de Les Arts este miércoles. La prestigiosa batuta de Juan Antonio Ramírez dirige el Concierto de Año Nuevo en un evento patrocinado de EsdiarioCV.
El Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia acoge el miércoles un especial Concierto de Año Nuevo a cargo de la prestigiosa Orquesta Sinfónica del Mediterráneo dirigida por Juan Antonio Ramírez, que cuenta con el patrocinio de EsdiarioCV. Varias sorpresas hay previstas en un evento muy especial.
Viena por unas horas se traslada a Valencia con la familia Stauss al completo. En el gran repertorio no faltará el ‘Pizzicato Polka’, ‘El Vals del Emperador’ y, como no, el ‘Danubio Azul’.
Juan Antonio Ramírez, natural de Anna, es uno de los saxofonista y director de talla internacional tras trabajar bajo la batuta de maestros como Lorin Maazel, Zubin Metha, Yaron Traub, Michel Plasson y Valery Gergiev. Ha participado como músico en la Royal Opera House, en el Covent Garden en Londres, en la Orquesta de la Accademia Nazionale di Santa Cecilia de Roma, en la Sinfónica de Timisoara y en la Orquesta y Coro del Teatro de la Ópera Kirov de San Petersburgo, entre otras.
-Podemos decir que el concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena lo hemos traído por adelantado a Valencia.
Claro. La música de Viena viene a Valencia el próximo miércoles. Traemos el espíritu, la tradición y, sobre todo, acogemos esa idea tan maravillosa que tuvieron en Viena de hacer un concierto de la familia Strauss con lo que ello conlleva. Con esas maravillosas partituras... Una música que tiene muchos contrastes, con dos estilos diferenciados como el valls o la polka. Vamos a incluir también cardas y músicas más populares como puede ser la Marcha Radetzky. Tenemos que ser muy agradecidos a Viena porque nos ha iluminado con un concierto, que es el más popular de la historia, el más visto mediaticamente (mil millones), y este año lo acogemos en Valencia.
La Orquesta Sinfónica del Mediterráneo tocará el concierto de Año Nuevo en Valencia
-¿Qué diferencias podemos encontrar en este concierto del miércoles con el de Viena?
Vamos a hacer una apuesta moderna, ágil, fresca del Concierto de Año Nuevo de Viena en otro contexto. El Palau de les Arts envuelve la música de forma especial al de la Sala Dorada de la Musikverein de Viena. Los valencianos tenemos una escuela musical propia.
-¿El programa diseñado es como el de Año Nuevo?
Sí, es totalmente Strauss. Únicamente vamos a hacer un valls francés, el famoso de los patinadores. Al público le encanta también esta obra de Émile Waldteufel.
Hemos preparado un programa amable y divertido que no va a dejar indiferente a nadie
-La Orquesta Sinfónica del Mediterráneo acaba de cumplir aniversario y con músicos valencianos en su totalidad.
Cumplimos 25 años haciendo todo tipo de conciertos. El 80% de los integrantes de la Sinfónica del Mediterráneo son valencianos y los que no han nacido en Valencia también. La Comunitat Valenciana es una tierra de acogida en lo personal y en lo artístico.
-¿Qué puede esperar el público que vaya el 26 al Palau de les Arts Reina Sofía?
El público, tanto el habitual como el que no haya ido nunca a un concierto de estas características, va a pasar una hora y media fantástica. Le va a encartar el programa. El Palau de les Arts es un espacio increíble y encima poder encontrarte con un repertorio, que aunque haya pasado muchos años siempre suena nuevo, es algo que queda para la memoria. Estar escuchando el Pizzicato Polka, que solamente con las cuerdas suena como que si estuvieran danzando, o disfrutar de la Obertura del Murciélago una melodía que te traslada a la primavera a la naturaleza de la Canal de Navarrés.
El programa no va a dejar indiferente a nadie. A alguno le gustará más una pieza u otra pero el programa está hecho a medida por y para el disfrute de los oídos. Quien pueda o quien le apetezca y tenga la oportunidad de acudir al espacio maravilloso como es el Palau va a despedir el año y la navidad con un concierto bonito, amable y sobre todo muy divertido.
-Nos apunta que habrá sorpresa.
Estamos realizado un gran esfuerzo y trabajo todos los implicados, la Orquesta, el equipo técnico y artístico, tanto de la organización como del Palau de la Opera, para hacer un gran concierto. Como decíamos al inicio para traer el espíritu del Concierto de Año Nuevo. No viene con el frío de Viena, ni con la pomposidad de la capital austriaca, pero en Valencia tenemos una luz y cuando entras al Palau de les Arts es algo espectacular. Quizá no le damos el valor que tiene. En Viena solo unos privilegiados puede ver en directo el concierto y aquí lo tenemos hasta por 30 euros, y lo ofrecemos en un espacio único como es el Palau de les Arts. Le puedo adelantar que habrá un momento estelar coreográfico de gran alto nivel.
-Qué director de los que han pasado por El Concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena es su referente?
Todos los directores que selecciona la Sinfónica de Viena son los más grandes de la historia. Desde los más jóvenes como Gustavo Dudamel hasta Daniel Baremboim. Si tuviese que elegir uno de la historia me quedaría con Carlos Kleiber. Para mi es la figura más importante y sobre todo la que más me transmite y en la que me inspiro.
-Usted tiene una trayectoria profesional que le ha llevado a dirigir en Londres, París o Viena.
Mis participaciones han sido muy modestas. En Londres toqué con los solistas del Convent Garden, una actividad muy gratificante. En Viena estuve formándome en una de las universidades más importantes del mundo y tuve la oportunidad de trabajar con directores con los que con posterioridad he coincidido incluso en el Covent Garden. También he trabajado en otros países europeos con escuelas muy características. Una sorpresa ha sido cuando fui a dirigir a la Orquesta Nacional de Armenia, tanto por su sonoridad como por su musicalidad. Esa orquesta me pareció de una sutileza y fuerza energética.
Afortunadamente en los 25 años que llevo de carrera como solista y director, he tenido la oportunidad de trabajar con muchos músicos y hacer programas muy diferenciados como por ejemplo con la Orquesta del Palau de les Arts, la Sinfónica del Mediterráneo...
-Usted es profesor del conservatorio de Valencia. ¿Se puede hablar de una escuela valenciana?
Pedagógicamente he tenido experiencias muy buenas. Mis primeras oposiciones las aprobé en el Conservatorio Superior de Tenerife y me encontré con una grata sorpresa: lo que el entorno daba el aprendizaje tenía mucho que recibir. Estuve dos cursos y luego tuve la suerte de ocupar la cátedra del Conservatorio Superior de Castellón que era cuando se iniciaba gracias a Salvador Seguí, un gran musicólogo y maravillosa persona.
Estuve cuatro años hasta que vine a ocupar la de Valencia y aquí he estado 17 años como catedrático de especialidad de instrumento. Trabajar con el alumnado en Castellón o en Valencia, y mire que somos vecinos, hay diferencias. En la misma aula en Castellón o en Valencia la recepción de los alumnos, la constancia y la dinámica de cada momento, cambia. La paz de Tenerife, la tranquilidad a Castellón, aunque las cosas iban moviéndose un poquito, al llegar a la vorágine aquí, en Valencia, donde tienes que estar con otro tipo de repertorio.