Ferran Torres & Kang In Lee: el soplo de aire fresco que se necesitaba
Casi por primera vez en lo que llevamos de curso – y ya van prácticamente cinco meses – lo brotes verdes se dejaron ver por Mestalla. Y buena parte de la culpa de ello la tienen dos chavales de 18 y 17 años respectivamente.
No obstante, el primer aspecto positivo de la pasada noche copera frente al Sporting no sería, precisamente, un episodio puntual en forma de brote verde. Pero tampoco “un día más en la oficina”. A esto último sí se le puede relacionar íntimamente el hecho de que la respuesta fuera tan extraordinaria por parte del aficionado – es algo frecuente dado el grado de identificación de la parroquia valencianista -, pero ayer no era simplemente un día más. Con todos los condicionantes negativos – y ciertamente ninguno positivo - que rodeaban al choque de ayer, aquello que se desprende de que el coliseo valencianista presentara una entrada cercana a las 35.000 personas resulta más que notable, y que esas casi 35.000 gargantas no dejaran de apoyar ni un solo instante pese a la mala primer parte realizada, una vez más, por el equipo es algo conmovedor. Así pues, el mejor patrimonio del club continúa intacto.
Marcelino, valiente de una vez por todas
En esos términos cabría valorar su decisión de sentar en el banquillo al inoperante Rodrigo Moreno una vez concluida la primera mitad, y máxime teniendo en cuenta que su sustituto Santi Mina terminaría por erigirse en el héroe del pase a los cuartos de final con sus dos dianas.
Pero si por algo cabrá recordar la actuación del técnico asturiano en la que bien podría haber sido su última confrontación en el banquillo local de Mestalla, no es por otra circunstancia diferente a la concerniente a la confianza depositada en los jovencísimos atacantes de banda Ferran Torres y Kang In Lee.
La noche de Ferran acabaría por resultar redonda desde todos los puntos de vista. Los 90 minutos disputados ya le consolidan - aún en mayor medida durante el tiempo de baja de Guedes – como alternativa fiable para ocupar uno de los flancos del ataque. Una medida asistencia a Santi Mina para el 2-0 y su posterior tanto – el de su estreno con el primer equipo -, de muy bella factura tras recortar y angular el disparo con la zurda al palo largo, hablan bien a las claras de la aportación para el conjunto que está en disposición de ofrecer ya de forma inmediata el jugador de Foios antes, incluso, de cumplir los 19 el mes que viene.
Sin embargo, si cabe más joven – son, en su caso, 18 los que cumple en febrero – es todavía Kang In Lee. Aquel, para algunos, producto de marketing que se daba a conocer en los “Talent Show” coreanos y que ya desde su más tierna infancia aparecía en anuncios junto a la, por aquel entonces, máxima estrella del país asiático Park Ji-Sung ya se ha hecho” mayor”. Por lo menos tanto como lo demuestra su compromiso exhibido durante un primer tiempo en el que se vio obligado a ayudar a su compañero Lato en el lateral mientras el Sporting creó problemas por su costado. Algo timorato a la hora de encarar, ya comenzó a dejar entrever las constantes de su fútbol, hasta el momento, en categorías de formación: no cejar en su empeño a la hora de pedir el balón y cuidarlo de los intentos de robo rivales como si no hubiera un mañana mientras lo posee. Sus 86 minutos por el césped han de servir como sinónimo de regeneración colectiva. Buena falta hace.