María José Catalá y dos números para explicar Valencia
María José Catalá esboza su programa para Valencia en una conferencia de la que destacan dos números: el de niños de 0 a 3 años, y el del porcentaje del tráfico que corresponde a las bicis.
El Club de Encuentro Manuel Broseta, que preside Amparo Matíes, parece un marco adecuado para presentar líneas maestras de programas electorales. María José Catalá ha esbozado el suyo para la ciudad de Valencia ante un auditorio en el que estaba la estructura regional de su partido, César Sánchez, diputados y senadores, el grupo municipal que ha heredado, y también cuatro rectores (de todas las universidades excepto la más antigua), el presidente de la AVL, el socialista Joan Calabuig, los líderes de la CEV y la Cámara de Comercio, media docena de directores de medios, otra media docena de subdirectores, un montón de afines, y un joven alternativo que ha tomado la palabra al final preocupado por si la interviniente pretendía revertir todos los carriles-bici de la ciudad.
Catalá ha explicado que quiere una ciudad regida por gente moderada, en la que en 2020 prevalezca el sentido común y la normalidad. Una ciudad con estatus de capital (pasta en los PGE), bien alumbrada, con menos delincuencia, y con distrito único educativo.
Pero si algo del discurso de la candidata ha llamado especialmente la atención de este cronista han sido dos números esgrimidos como argumentos: en una ciudad de 800.000 habitantes no puede ser que sólo hayan 18.000 niños de cero a tres años, y tampoco puede ser que las bicicletas impongan una “dictadura” en la movilidad de los valencianos suponiendo tan sólo el 5% del tráfico en la urbe.
La candidata popular se ha permitido animar a los que tengan capacidad de voto en las primarias de Compromís a hacerlo por Giuseppe Grezzi, el segundo máximo responsable del problema del tráfico en la ciudad, porque “para mí es muy importante que esté en la lista”.