Vox trata de apaciguar a sus bases en Valencia movilizándolas para Vistalegre

Después de la protesta del pasado lunes y de la designación de la gestora provincial, que en la práctica ha servido para consolidar en el poder interno al anterior presidente, José María Llanos, Vox no tiene previsto hacer más movimientos ni en el ámbito autonómico ni en el provincial.

Con la convocatoria de elecciones ha decidido centrar todos sus esfuerzos en el ya anteriormente previsto acto de Vistalegre, donde la formación que preside Santiago Abascal espera repetir el lleno de hace un año y reunir a unas 10.000 personas en este palacio de congresos y actuaciones madrileño.

Ese evento, como ocurrió en 2018, puede marcar un antes y un después en el futuro del partido. En octubre del pasado año le sirvió para dar un golpe de efecto que lo llevó en volandas a entrar en el parlamento andaluz y, ya en abril de este 2019, a conseguir una nutrida representación en el Congreso y en Les Corts. Ahora Vox espera que surta el mismo efecto ante los comicios del 10 de noviembre. Pero para ello tiene que llenar y necesita que todas las provincias movilicen a militantes y simpatizantes para el domingo 6 de octubre, a las 12 horas.

Esta situación en la provincia de Valencia llega tras la difusión de un manifiesto de militantes y cargos públicos pidiendo que de la gestora no formaran parte ni José María Llanos ni ninguna de las personas que integraron la anterior dirección provincial. La respuesta desde Madrid ha sido no solamente designar al diputado autonómico Llanos como presidente de la citada gestora, sino que la completara con un equipo de su total confianza.

Ese hecho ha elevado el malestar existente en una parte de la militancia del partido y que se percibió en la concentración del pasado lunes por la libertad en la enseñanza, a la que estaban convocados todos los cargos públicos y a la que la asistencia fue reducida.

Desde la dirección provincial quieren aligerar esa tensión insistiendo en que es momento de unión de cara a mantener o superar los actuales 24 diputados nacionales en el Congreso. Para ello van a convocar reuniones con los coordinadores locales para implicarles en la movilización de cara a Vistalegre 2 e instarles a centrarse en los comicios, de manera que los problemas internos queden aparcados hasta después del 10-N. A partir de esa fecha, con los resultados de las elecciones en la mano, la perspectiva puede ser diferente.