La culpabilidad de Plácido Domingo pone en duda su vinculación con Les Arts

Tras la aceptación por parte del tenor, Placido Domingo, de los abusos de los cuales varias mujeres le acusaban, el Palau de les Arts de Valencia ha anunciado que se reunirá para estudiar la situación y, finalmente, tomará la decisión que marcará la relación entre la institución y el tenor. Así mismo, el grupo parlamentario Compromís ha expresado su deseo de cambiar el nombre de Plácido Domingo del Centro de Perfeccionamiento.

Alrededor de 6 meses después del estallido del caso, se han obtenido las primeras conclusiones. El acusado, tras negar la situación en repetidas ocasiones, finalmente ha asumido su responsabilidad y pedido perdón a las mujeres que sufrieron este abuso de poder. Después de que el tenor emitiera estas declaraciones, el director artístico del coliseo de Valencia, Jesús Iglesias, ha expresado su cautela en lo que se refiere a la relación y la vinculación de la institución con Domingo.

Jesús Iglesias ha asegurado que los órganos de Gobierno del coliseo, el patronato y la comisión ejecutiva se sentarán para discutir y valorar las direcciones que se pueden tomar y ha recalcado que la institución valenciana tiene un protocolo de actuación para casos como este. Sin embargo, también ha querido detallar que dentro de Les Arts no consta ningún tipo de denuncia contra Plácido Domingo.

Por su parte, Compromís no solo quiere retirar su nombre del centro, sino también pide que se sustituya por una propuesta que refleje la aportación de la mujer dentro de la música, el arte y la cultura, para corregir las desigualdades y las injusticias. La posición del grupo político parece ser más tajante con su intención de que el tenor se desligue de sus relaciones con las instituciones valencianas, con el objetivo de que las acusaciones no repercutan sobre ellas.

Plácido, quien colabora en la sección de alumnos del Centro de Perfeccionamiento y aconseja a sus alumnos, no cuenta con ninguna actuación ni actividad en su agenda para esta temporada en la ciudad de Valencia.

Esta actitud de cautela por parte de España, y que se repite en otros países de Europa que mantienen sus espectáculos previstos para los próximos meses, choca con la posición drástica de Estados Unidos, quienes desde el principio mostraron su desaprobación ante los, en un primer momento, "supuestos" abusos. Las óperas de San Francisco y Dallas y la Orquesta de Filadelfia suspendieron sus actuaciones de inmediato.