¿Qué está haciendo el Gobierno valenciano ante la amenaza del coronavirus?
Luis Motes reflexiona sobre la infección del coronavirus, pero también sobre otra infección que acecha a nuestra Comunidad y a la sociedad: la que politiza la Justicia y la hace injusta.
Italia ya es el segundo país con mayor número de infectados y, sin embargo, sus aviones siguen llegando a nuestros aeropuertos de Manises o del Altet.
Ante esta situación, el Gobierno valenciano parece que se ha animado a dar la cara. Tanto el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, como el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, han creado órganos específicos, interministeriales, para hacer frente a la amenaza de la enfermedad. De hecho, han escenificado esa toma control.
Pero, en nuestra Comunidad, hay otra 'infección': la que politiza la Justicia y la hace injusta. El pasado viernes se conoció el fracaso de otro fiscal a cuenta de la presunta corrupción. Los procesados por el denominado 'Caso Palau' sobre el aprovechamiento de los posibles patrocinios en en Palau de les Arts - que, según el juez, nunca ocurrió-, se vieron limpios de sospecha cinco años después de que se produjeran estos hechos y de que sus reputaciones fueran pisadas por el fiscal y por los medios de comunicación. Una de las acusadas, incluso, Helga Schmidt, murió durante estos años, de cáncer y de pena.
Ni a ella ni a los demás, nadie les va a pedir disculpas. Los detuvieron rodeados de Geos y un helicóptero y les acusaron de robar sin que hubieran hecho nada. ¿Para cuándo el delito de prevaricación para un fiscal o de prisión para quien denuncie con falsedad o dolo?
Una pregunta sobre la que cabe reflexionar, sin duda.