Compromís llama "explotadores sin escrúpulos" a los empresarios turísticos
La polémica abierta por Mónica Oltra no decrece. El singular senador Mulet saca lo mejor de sí mismo en tuiter contra los empresarios turísticos valencianos.
El máximo responsable dee Hosbec, Toni Mayor, a la izquierda con Oltra en la Fitur.
Las de declaraciones de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, donde criticaba el modelo turístico “de masas” de la Comunitat Valenciana e invitaba a una reconversión del sector, ha levantado una polvareda. La patronal hotelera Hosbec, que engloba a las principales empresas turísticas, emitió un comunicado en el que pedía a la vicepresidenta que “considerara su dimisión” por unas declaraciones de “miseria inaudita y una animadversión crónica sobre este sector de forma reiterada”.
El cruce de acusaciones entre Oltra y Hosbec se trasladó a otros dirigentes de Compromís como el senador Carles Mulet, que terció en la polémica para decir que los hoteleros valencianos “son unos explotadores sin escrúpulos con la piel muy fina acostumbrados a que no les puedan decir las verdaderas” a lo que añadió “tela la porquería que han soltado”.
Junto a Mulet, diferentes seguidores de Oltra salieron en defensa de la vicepresidenta cargando contra el modelo turístico valenciano, como el secretario autonómico de Igualdad y Diversidad, Alberto Ibáñez, que señaló que “las comarcas más empobrecidas son las turísticas”.
Este ataque parece que no ha sentado bien en todos los sectores de l formación, que desde hace unos meses vive una guerra silenciosa entre el ala más nacionalista del Bloc y el ala más izquierdista liderada por Oltra. Así, el histórico dirigente del Bloc, Joan Mansanet, subraya que “desde los referentes del municipalismo del Bloc nunca se hubieran hecho esas declaraciones totalmente desafortunadas”. Un episodio más de colisión por el futuro control de Compromís.
Esta guerra entre Compromís y el sector hotelero llama además la atención en un momento en el que el turismo está pasando por un momento muy duro en la Comunidad Valenciana, con la temporada de verano perdida y numerosos puestos de trabajo destruidos, y donde desde el Consell y uno de los partidos que lo dirigen deberían poner énfasis en ayudar en lugar de entrar ahora en guerras.