Encuesta: El tablero electoral empieza a animarse en la Comunitat

¿Qué pasaría si hoy se celebraran elecciones autonómicas tras la crisis sanitaria del coronavirus? Pues que el panorama político cambiaría, pero no tanto como para que hubiera un vuelco de gobierno de izquierda a derecha. La principal novedad es que el PP recuperaría bastantes votos y escaños -6 en total- a costa del desplome de Ciudadanos, pero esta subida no serviría para desbancar al pacto del Botànic del gobierno de la Generalitat, según los datos del portal especializado en demoscopia Electomanía -que se aproximó a los resultados de las últimas elecciones-.

Según la encuesta publicada ayer por Electomanía, el PP de Isabel Bonig subiría hasta el 23,6% de los votos y 25 escaños, seis más que en la actualidad, y se quedaría pisándole los talones al PSPV, que obtendría el 26,2% de los votos y 27 escaños, repitiendo como fuerza más votada de la Comunitat Valenciana.

Del resultado del PSPV de Ximo Puig llama la atención que se queda igual, ni baja ni sube, lo que significa que esta crisis sanitaria no habría erosionado al partido que ostenta la presidencia de la Generalitat pero tampoco ha servido para empujar la figura del presidente Puig, a diferencia de lo que ocurre en otras comunidades autónomas, donde el partido del presidente crece.

Los socios de Gobierno de Puig sí experimentan una ligera variación. Compromís perdería un escaño que en este caso recoge Unidas Podemos, que sube uno. El gobierno del Botànic podría reeditarse sin problemas ya que no pierde escaños en favor de la derecha, pero con una Oltra que ve que su coalición está estancada, ya no crece en votos e incluso pierde en favor de otros partidos de izquierda.

En el lado de los partidos de la oposición es donde se produce la variación más considerable. La subida de 6 escaños del PP iría acompañada de otra subida de Vox, de 3 escaños en concreto, obteniendo 13 escaños y el 12,6% del voto, y colocándose como cuarta fuerza política de la Comunitat Valenciana. El gran perdedor sería Ciudadanos, que bajaría de sus 18 escaños actuales a 9, la mitad, y al 8,8% de los votos. El tirón de Toni Cantó parece que no frena la sangría de Ciudadanos en territorio valenciano, que se desploma considerablemente al igual que en el resto de España.

Así quedaría el panorama político de la Comunitat Valenciana según Electomanía, con un cambio de fuerzas en la derecha con un PP y un Vox reforzado y un Ciudadanos en horas muy bajas, pero sin lograr romper la mayoría de la izquierda, que no crece durante esta crisis (no hay ‘efecto bandera’) pero tampoco se desgasta, pudiendo reeditar su gobierno.