Galiana Vs Fuset: la guerra fallera que incendia Compromís

En los mentideros falleros no ha pasado desapercibido la renovación que ha hecho Carlos Galiana, concejal de Cultura Festiva y presidente de la Junta Central Fallera (JCF) de Valencia, y no porque todos sus miembros sean mujeres, sino porque ha eliminado a todos los colaboradores de Fuset y ha incluido a personas que se han caracterizado por haber combatido al ahora concejal procesado.

Este episodio de desprecio de Galiana a Fuset y de eliminar su legado es sólo un capítulo más en la guerra soterrada que ambos concejales de Compromís llevan por hacerse con el control de la JCF.

La guerra de Galiana y Fuset viene desde el mismo momento en que Joan Ribó se hizo con la vara de mando de alcalde. Entonces todas las miradas apuntaban a Galiana, que había sido presidente de la falla Sevilla-Dénia, como futuro concejal de Cultura Festiva. Galiana llegó a presentarse ante el público fallero como futuro presidente de JCF.

Pero Joan Ribó no se acababa de fiar de Galiana, alguien con pasado en el mundo fallero y del que podrían sacar trapos sucios, y optó por un perfil blanco sin pasado ni experiencia en las Fallas como Pere Fuset. El sueño de Galiana (que en su día había trabajado para la JCF del PP y luego le declaró la guerra metiéndose en Compromís) se esfumó de un plumazo.

Desde entonces la relación entre los concejales ha sido muy tensa. Galiana, que tiene mayor conocimiento del mundo fallero, no defendió a su compañero de gobierno municipal en las distintas polémicas que Fuset tuvo con el mundo fallero.

Pere Fuset, en uno de sus últimos actos como concejal de Cultura Festiva

Su rivalidad se traslada hasta a su pertenencia a una comisión. Ambos son de fallas de Ruzafa, pero mientras Galiana es fiel a Sevilla-Dénia, Fuset es fallero de Cadiz-Cura Femenía ‘Noscarmientas’, que para más inri preside el portavoz del PP en Mislata y persona cercana a Isabel Bonig, Jaime Bronchud... que es muy amigo a su vez de Galiana.

Padrinos políticos

También hay rivalidad en sus padrinos políticos: Galiana es muy amigo de Mónica Oltra y la tiene como su principal defensora y valedora. Incluso algunos han señalado que en caso de que Oltra no quiera ser candidata a la alcaldía, intentaría que el candidato fuera Galiana. Fuset en cambio hace más migas con Ribó, y si no tuviera un proceso judicial en marcha, muchos en Compromís lo consideraban el candidato natural para sustituir a Ribó.

Galiana ha conseguido por fin su preciado tesoro de presidir JCF tras el procesamiento de Fuset, y se ha tomado su venganza eliminando por completo a sus colaboradores y haciendo una JCF de gente crítica con Fuset que bien podría haber hecho un concejal del PP.

Pero la guerra no ha acabado: Galiana segura que él no es un sustituto temporal de Fuset, sino que ha llegado para quedarse. Mientras, Fuset defiende su derecho a volver a presidir JCF si es exonerado del caso del accidente de Viveros por el que está sentado en el banquillo. Veremos cuál es el próximo episodio que depara la guerra que amenaza con hacer saltar la parte fallera de Compromís por los aires.