Navarro (CEV): " En 2020 han desaparecido 4.500 empresas y otras siguen débiles"
El presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), Salvador Navarro, asegura que la recuperación pasa por prorrogar los ERTEs, agilizar las ayudas y avanzar en la vacunación
Salvador Navarro es el máximo responsable de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) desde 2010. En 2015 fue reelegido, por aclamación de la Asamblea de la CEV, como presidente para los próximos 4 años. Salvador Navarro es máster en dirección de empresas y cuenta con amplia formación postgrado en alta dirección y dirección financiera. Se incorporó a la dirección general de CBL Logística en 1996 y cinco años después ocupó la presidencia de la organización nacional de Cave Logística. En el período 1982-1995 desempeñó diversos cargos en Comercial Terrestre Marítima de Levante S.L.
Navarro realiza en esta entrevista una radiografía general de las empresas de la Comunitat Valenciana cuando parece que el ritmo de vacunación está permitiendo vislumbrar un horizonte temporal de recuperación económica.
P.- ¿Cuál es la situación de las empresas a día de hoy en la Comunitat Valenciana?
R.- Han sido meses duros, para algunos sectores incluso de actividad e ingresos cero. Las empresas se han enfrentado a cierres, restricciones, incertidumbre, problemas de liquidez, de solvencia, y eso ha tenido un coste alto en puesto de trabajo. Por eso hemos abogado por hacer compatible salud y economía, siempre atendiendo a la evolución de la pandemia.
La economía de la Comunitat Valenciana sigue alejándose del punto mínimo que el desplome de la actividad marcó en el mes de abril del año pasado, pero todavía mantiene una distancia significativa respecto a los niveles previos a la crisis.
P.- ¿Ya se puede hablar de reactivación económica?
- Los últimos datos del paro recogen un descenso del número de parados en las tres provincias de la Comunitat Valenciana, así como en todos los sectores de forma generalizada. Esto es positivo, aunque siendo realistas, no podemos obviar que estas cifras no contabilizan los más de 80.000 trabajadores que aún siguen acogidos a un ERTE, ni que la actividad de muchas empresas aún sigue bajo restricciones, lo que limita su capacidad de reacción y reactivación.
La consolidación de una tendencia favorable pasa necesariamente por la aceleración del proceso de vacunación, la agilización de las ayudas directas y la negociación de la nueva prórroga de los ERTE más allá del 31 de mayo. A partir de ahí la recuperación puede cobrar fuerza a partir de la segunda mitad del año.
P.- ¿Qué impacto económico ha supuesto la pandemia en las empresas valencianas?
- La incidencia de la crisis ha sido muy distinta por sectores, aunque, sin duda, el turismo, y todo lo relacionado con él, la hostelería, el ocio, los hoteles y las agencias de viaje, son los afectados con mayor intensidad, con caídas del 41% del valor añadido y del 30,4% del empleo. El turismo cerró su peor año en medio siglo por la pandemia y todo el tejido productivo que lo rodea lleva desde marzo del año pasado sin apenas actividad.
Además, en 2020 han desaparecido cerca de 4.500 empresas y el problema es que muchas otras están muy debilitadas porque acumulan demasiados meses de baja actividad.
P.- ¿Podrá el plan de 680 millones de euros en ayudas directas a pymes y autónomos lanzado por el Gobierno paliar esta situación?
R.- Agradecemos este plan, pero hemos ido en demasiadas ocasiones por detrás de la pandemia y lamentablemente para algunas empresas llega tarde. Sabemos, además, que la cifra no es suficiente, pero esperemos que, sumada al Plan Resistir, permita, al menos, que bastantes negocios que por imperativo legal han tenido que cerrar o han visto mermadas sus cifras de negocio como consecuencia de esta pandemia se vean compensados.
Nuestra intención ahora es trabajar para que lleguen cuanto antes y se incluyan en el Decreto más sectores que han sufrido igualmente la crisis.
Es fundamental que en el proceso de vacunación se cuente con el sector privado. Que las mutuas puedan sumarse al plan supondría un gran paso adelante
P.- ¿Cómo valoran la aplicación de los ERTEs?
- Como decía, en la Comunitat Valenciana aún quedan cerca de 82.000 trabajadores acogidos a un ERTE. Este instrumento, por el que apostamos desde un inicio, ha funcionado bien y ha ayudado a contener la destrucción de empleo, pero hay que ser realistas, y aunque es difícil dar una cifra, sabemos que si esta situación se prolonga mucho en el tiempo y no se activan pronto las reclamadas ayudas corremos el riesgo de que un buen número de ERTEs se conviertan en EREs. De ahí que necesitemos no sólo que se prorroguen los ERTEs hasta finales de año, para que las empresas puedan operar con mayor previsión, sino que se tenga en cuenta que las condiciones en las que se negociaron los primeros no son las de ahora.
Esto, junto a fomentar el empleo juvenil o renovar las políticas activas de empleo, debería ser ahora lo prioritario.
P.- ¿Cómo podrán afrontar las empresas la reactivación económica tras meses de pérdidas?
- Los problemas de liquidez de las empresas se han convertido en problemas de solvencia y eso significa cierres y, por lo tanto, más destrucción de empleo. Ante esta situación, la pervivencia de muchas empresas y la reactivación económica únicamente podrá ser efectiva con la colaboración de las distintas Administraciones.
Qué duda cabe que en esta reactivación también van a ser importantes los fondos europeos. El nuevo Fondo de Recuperación Next Generation EU permitirá a España movilizar un volumen de inversión sin precedentes, 140.000 millones de euros en transferencias y créditos en los próximos seis años, un 11% del PIB de 2019. Esto significa que estamos ante una oportunidad histórica para modernizar nuestra economía y hacerla más competitiva, más resiliente, más sostenible y más digital. Desde CEV estamos trabajando codo con codo con la Administración para activar en la Comunitat Valenciana tantas iniciativas como sea posible. Y con ese objetivo hemos impulsado y promovido la participación empresarial en todas las expresiones de interés publicadas desde los distintos Ministerios.
No podemos permitirnos de ningún modo perder la campaña turística del próximo verano
P.- ¿Cuáles son las expectativas de cara a la temporada turística de verano?
- Lo primordial para la recuperación es la vacunación. Es la clave. Tenemos que intentar vacunar a la mayor parte de la población y que eso nos permita recuperar la movilidad. No podemos permitirnos de ningún modo perder la campaña turística del próximo verano y los últimos contratiempos en el proceso están generando, de nuevo, incertidumbre. Es fundamental que en el proceso de vacunación se cuente con el sector privado para impulsar el proceso y conseguir el objetivo. Si esto se consigue la recuperación económica llegará antes.
P.- ¿Qué están reclamando a las instituciones?
- En primer lugar, acelerar el proceso de vacunación, contando con el sector privado. La CEV y la Fundación CEOE, han firmado un acuerdo con la Generalitat para facilitar que las empresas puedan colaborar en la vacunación de sus empleados a través de las mutuas o los servicios médicos propios. Que las mutuas puedan sumarse al plan supondría un gran paso adelante, por su alcance territorial y por el elevado número de profesionales con los que cuentan.
Hay que utilizar todos los recursos para aumentar el ritmo de vacunación y liberar a las empresas y trabajadores, cuanto antes, de las restricciones a la que está sometida su actividad.
Del mismo modo, y como hemos venido solicitando desde el inicio de la pandemia, urgen ayudas directas a las empresas, ampliando el número de sectores beneficiarios; así como comenzar a negociar de forma urgente la prórroga de los ERTEs más allá del 31 de mayo para que las empresas puedan ajustar su marco de previsiones con mayor seguridad y certidumbre.
P.- En relación al teletrabajo, ¿Estamos ante una herramienta que ha llegado para quedarse?
- Indudablemente el teletrabajo ha llegado para quedarse. Es una forma más de organización del trabajo, y ha sido una herramienta fundamental en los momentos más complicados de la crisis sanitaria porque permitió mantener la actividad en muchas empresas. No obstante, hay que tener en cuenta dos consideraciones, primero, que para que funcione bien, requiere de la colaboración entre trabajadores, sindicatos y empresas, y segundo, que gestionar el tiempo de trabajo de esta forma no es posible en todos los sectores ni empresas.