Yolanda Díaz trae optimismo para la economía valenciana y habla de "revolución"
La vicepresidenta tercera del Gobierno reconoce que existe una infrafinanciación autonómica pero delega las responsabilidades a Hacienda con María Jesús Montero
La vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se ha desplazado a Valencia cargada de optimismo sobre el futuro económico, social y sanitario de la Comunidad. Tras mantener un breve encuentro con el alcalde Joan Ribó, la enviada por el Gobierno ha proporcionado multitud de datos que evidencian una paulatina reactivación en la gran mayoría de indicadores que competen a su área de trabajo. A pesar de reconocer que la región ha sido una de las que más ha sufrido el impacto de la crisis de la pandemia, junto con las islas Baleares y Canarias, por tener un nivel productivo "muy ligado" a los sectores del turismo y su cadena de valor, la situación actual le permite vislumbrar un gran margen de esperanza durante la recuperación.
Un proceso de transición hacia la "nueva normalidad" que para Díaz ya se ha convertido en una realidad. Durante el pico más alto de la pandemia, la Comunidad Valenciana llegó a tener hasta 369.000 personas acogidas al ERTE frente al poco más de 53.000 trabajadores contabilizados a día de hoy por su Ministerio. Del total de incorporados al mercado laboral el 85 '5 % lo han hecho manteniendo todos sus derechos, lo que según la vicepresidenta pone de manifiesto la "eficiencia y correcto desarrollo" de las medidas de contención.
Este sistema de protección social supuso un importe de inversión pública del Estado de más de 1.900 millones de euros, que sumado a las prestaciones ordinarias por desempleo supera los 2.900 millones de euros . "Una inversión sin precedentes que ha permitido salvar empleos, empresas y familias", explicaba Díaz en el Ayuntamiento de Valencia. Asimismo, se ha referido al "humilde" mecanismo de protección a autónomos que ha generado un gasto de 1.000 millones de euros y que habría servido para "conservar el tejido productivo".
Aún con todo, la ministra reconoce que en la Comunidad quedan muchas cosas por hacer, comenzando por avanzar en el autogobierno y en la infrafinanciación de los servicios públicos. El actual modelo presupuestario, sostiene, cumple con el estatuto en lo referido a los niveles de financiación vinculados con el número de habitantes, pero sabe que todavía resulta insuficiente y traslada las responsabilidad al Ministerio de Hacienda. "María Jesús Montero propiciará avances lo antes posible", comentaba al respecto.
Por otro lado, ha definido la nueva reforma del mercado laboral con la que lleva meses trabajando como una "auténtica revolución" basada en el diálogo social con dos premisas previas para que funcione: la discreción y confidencialidad. Con la derogación de la reforma del PP que llevaba vigente 42 años pretende también que los Ayuntamientos se conviertan en actores y protagonistas con "voz y decisión propia".