Cerrar

Caso IVAM: Ahora sí, listo para sentencia

La supuesta "trama criminal" queda en nada en el juicio sobre la compra de obra del gran artista Gerardo Rueda por el Instituto Valenciano de Arte Moderno.

La exdirectora del Ivam Consuelo Ciscar y su abogado Juan Molpoceres durante un juicio por un presunto que se inició en la Audiencia de Valencia, a 2 de noviembre de 2021.

Publicado por
Fernando García Bonet

Creado:

Actualizado:

El Tribunal de la Sección 5ª de la Audiencia de Valencia que preside la magistrada Concepción Ceres y completan los magistrados Alberto Blasco como ponente e Inmaculada Domínguez, enjuiciando la conducta de Consuelo Císcar, Juan Carlos Lledó y José Luis Rueda, acusados por la adquisición por el IVAM de obra póstuma de Gerardo Rueda, ha dado fin a su desarrollo, y a considerarlo listo para los

primeros pasos de la sentencia.

Así es, porque tres semanas después de su inicio, en una suerte de bucle del procedimiento jurídico, las palabras de los alegatos de los propios acusados han sido las últimas pronunciadas en la sala Tirant del Palacio de Justicia. La jornada ha sido apretada y muy rica en matices.

El Informe definitivo de la acusación particular, a cargo de Miguel Ángel Cervera como letrado de la Abogacía de la Generalitat, como ocurriera con el del ministerio público que representa Virginia Abad, y siguiéndolo en su parte nuclear, apenas se desvió del previo en lo sustancial. Como también se vería a continuación con el de la letrada que representa a la acusación popular. Hasta aquí, cabe revalidar el titular de ESdiario de ayer: “Diálogo de sordos”. Eso sí, ya nadie habló de "trama criminal" y gran parte de los titulares sobre el 'gran caso de corrupción' han quedado aniquilados tras las tres semanas de juicio.

Así vino a constatarlo el Informe o alegato final de las defensas que intervinieron a continuación. El primero en hacerlo, el letrado Juan Molpeceres, representando a la ex directora del IVAM, ha realizado un exhaustivo y fidedigno relato de hechos que considera probatorios, extraído del propio desarrollo del proceso, y expuesto de manera ordenada, didáctica y exacta. Observadores muy conocedores de la causa desde los inicios no han dudado en calificarlo de brillante, no sólo por su exposición y contenido, sino por la amplitud y rigor de su conocimiento sobre lo que se está

juzgando. Lejos de ser una especie de contra-informe de los oídos a las acusaciones, el letrado ha querido subrayar al tribunal aquella cuestiones que a su criterio, tras escuchar testigos y peritos, han quedado indubitables y respaldan su razonada solicitud de inocencia. El beneficio neto económico estimado a favor del museo, entre otras. Muy crítico con la acusación popular -lo fue desde su personación en mitad de la instrucción- solicitó condena con pago de costas judiciales para la Asociación que la ejerce.

Adhiriéndose a la de su colega, Francisco de Antonio, en defensa de Juan Carlos Lledó, no se amilanó ante las referencias a la condena por conformidad en la denomina pieza 1, o principal, que fue dictada en julio pasado. Por el contrario, sostuvo con énfasis su argumentación de conducta ya juzgada, con la calificación de continuada, el famoso “bis in ídem” por el que nadie puede ser procesado más de una vez por el mismo hecho. Tampoco evitó poner en duda la objetividad de afirmaciones de las acusaciones carentes de hechos probatorios. Ni hacer su propia cuenta en términos económicos del balance de la operación, para acabar reclamando la debida inocencia de su

patrocinado.

Especialmente incisivo, siempre en la línea amable y respetuosa de todas sus intervenciones, el letrado Santiago Milans del Bosch, defendiendo los intereses de José Luis Rueda, ha cuestionado el papel jugado por las acusaciones, empezando por el ministerio fiscal al que se ha referido repetidamente, recordando la banalidad y crudeza de las palabras de su titular al calificar la operación de capricho para favorecer al hijo de un amigo. Evidenció y reprochó a las acusaciones, sin llamarlo así, ese diálogo de sordos por el que nada de lo que había ocurrido en la sala había sido

considerado en sus conclusiones. No quieren hechos, no quieren leyes, gustan de códigos, de apreciaciones personales, vino a decir. Como ya había anunciado, extendió también a la Abogacía de la Generalitat la solicitud de condena en costas.

Las palabras del heredero del artista cerraron la sesión algo después de las tres de la tarde. Tanto él como Lledó, fueron cuidadosos en las formas y concisos en la reafirmación de la normalidad y la inocencia de sus respectivas conductas. De las pronunciadas por Consuelo Císcar ratificando su inocencia ESdiario ha publicado una extensa nota con anterioridad.