La Unió acusa a la Generalitat de financiar los cítricos catalanes con 50.000 €

Menos debate y más gestión. Medidas "reales" y efectivas". La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) y la Unió de Llauradors han reclamado en Les Corts que se investigue por qué el precio de los cítricos baja en el campo y sube para los consumidores, una crisis del sector ante la que ven necesario maximizar ingresos y minimizar costes.

Así lo han expuesto los presidentes de AVA y la Unió, Cristóbal Aguado y Carles Peris, respectivamente, en sus comparecencias en la comisión especial de estudio sobre la situación del sector citrícola valenciano. Son peticiones que ya trasladaron en la multitudinaria tractorada del pasado viernes en Valencia.

Peris ha acusado al Consell de apoyar "el cadáver de Intercitrus desde la Generalitat, con 50.000 euros anuales y la cesión de un local para su domicilio social, se está apoyando el consumo de cítricos de Cataluña, Murcia y Andalucía cuando sus administraciones no contribuyen económicamente a su mantenimiento".

El representante de la Unió de Llauradors no ha tenido pelos en la lengua, lo ha dejado claro y nítido. Mantiene que no es lógico apoyar a "una entidad que margina y evita la participación de una buena parte representativa del sector productor citrícola y que no cumple además con la función fundamental que tiene asignada como la promoción de los cítricos".

Ha apostado así por una interprofesional citrícola "estrictamente en clave valenciana" y por dar más apoyo a la IGP (indicación geográfica protegida) Cítricos Valencianos, al tiempo que ha exigido más promoción citrícola en el exterior ante la competencia de terceros países y el aumento de productos sustitutivos.

Los ricos más ricos, los pobres, más pobres

Aguado denuncia que "los eslabones más fuertes de la cadena se hacen ricos y no paran de comprar fincas" mientras los productores vuelven a incurrir en pérdidas, por lo que se han preguntado "por qué las leyes no están sirviendo de nada para solucionar este abuso".

"Estamos dispuestos a todo, pero no se engañen: las iniciativas, los recursos, la gestión y la aplicación de las medidas están en su tejado, en el tejado de la clase política, gobernante y no gobernante, porque debería haber una hoja de ruta consensuada para al menos diez años y no la hay", ha urgido a los diputados.

"Si las administraciones siguen sin reaccionar, se irán perdiendo agricultores hasta pasar del subsector agrario más importante de la Comunitat Valenciana a algo residual".

Ha exigido así medidas "reales" y efectivas "además de debatir, proponer y votar", ante una situación que ha definido como ruinosa por el aumento de las explotaciones sin cultivar y de la edad media de los productores "sin relevo generacional".

También ha remarcado que "el sector en su conjunto no puede estar unido porque varios agentes de la cadena obtienen beneficios y no tienen ningún interés en que cambie la dinámica", aunque ha destacado el apoyo que recibió la tractorada unitaria del viernes con centenares de personas y más de 200 tractores.

Crear una Agencia Autonómica de Control

En la misma línea, Peris ha instado a la Generalitat a crear una agencia autonómica de información y control alimentarios y a "dotarla de recursos suficientes para que sea efectiva", con el objetivo de aumentar la rentabilidad.

Otra de sus peticiones es aumentar la prevención para controlar plagas como la Xylella o el Cotonet de Sudáfrica y evitar la entrada de nuevas, ya que hay estudios que indican que "por cada millón de euros invertido en prevención, se evitan daños por valor de cien millones de euros".

También en materia de sanidad vegetal e importaciones de terceros países, Peris ha solicitado la constitución de un lobby agrario valenciano para influir ante las instituciones europeas en beneficio del conjunto del sector.

Paralelamente, a su juicio, el sector requiere de un plan de reconversión y reestructuración sectorial. "Tenemos que producir lo que quiere el consumidor y adaptar nuestra gama varietal", ha resumido, y ha insistido en la necesidad de disponer de un mapa agronómico que ayude a tomar decisiones acerca de las mejores variedades de cítricos u otros cultivos a plantar.