Galiana contrata ‘artistas’ y no ‘compiyoguis del PP’
El concejal de Cultura Festiva de València, Carlos Galiana, rechaza las críticas del PP por el "excesivo" número de contratos menores en la Gran Feria de Julio 2022.
La replica de Galiana a Santiago Ballester por las afirmaciones de que Cultura Festiva ha realizado 120 contratos menores por valor de 680.000 euros como consecuencia de quedar desiertas tres de las cinco licitaciones, no se ha hecho esperar. Galiana (Compromís), en declaraciones remitidas a los medios, asegura que los 'populares' muestran una "ignorancia extrema" respecto a las tipologías de contratos, algo que "les inhabilita como gestores públicos", o "una mala fe insana para manipular a la opinión pública que les califica más allá de su condición de políticos”.
"La inmensa mayoría de los contratos a los que se refiere el PP son contrataciones artísticas, para poder contar con la participación de grupos de toda índole y cubrir así una programación que ha recorrido decenas de ubicaciones diferentes por toda la ciudad, atendiendo así una voluntad política de trabajar para la ciudadanía", recalca.
De hecho, Galiana sostiene que los contratos menores no artísticos fueron "residuales" para dar respuesta a un concurso que quedó desierto y que esto supone "una auténtica ruina para la demagogia del PP, que no basa su oposición en ninguna iniciativa constructiva sino en mentir”.
Dentro de esos contratos, destaca, se incluyen los banderines de los premios de la Batalla de Flores, un encarte para un libro y otros contratos que "no llegan ni a 400 euros". Critica así que "el desconocimiento de Mª José Catalá — portavoz municipal ‘popular' — es supino, máxime cuando tienen acceso garantizado a los expedientes si así lo requieren”. Y es que el también edil de Comercio advierte que el PP se ha dedicado a "sembrar la duda entre la ciudadanía" durante toda la Gran Fira, "con comunicados que solo querían tumbar una fiesta a la que la ciudadanía ha respondido masivamente". "Si fuera por ellos —remata—, la Batalla de Flores habría quedado desierta al pregonar 48 horas antes que corría peligro, un auténtico despropósito político que los deslegitima para ser una alternativa seria al gobierno de Joan Ribó".