Educación no concilia: los valencianos, los últimos de España en volver al cole
En pleno debate sobre la conciliación y cuando comunidades como Madrid se abren a iniciar el curso el 1 de septiembre, en la Comunitat Valenciana la vuelta al cole se retrasa al 12
Los valencianos serán de los últimos en volver a las aulas. El inicio del curso escolar tanto para infantil, primaria, ESO y Bachillerato será el día 12 de septiembre frente a otras comunidades que el 7 y el 8 de este mes ya están incorporando los alumnos a las aulas. Una fecha tardía que se pone ahora en mayor evidencia ante el debate de la conciliación que están planteando muchas familias donde ambos progenitores trabajan.
En concreto, Cataluña es la comunidad que más pronto inicia la vuelta al cole el 5 de septiembre, Melilla el 6, Navarra y Madrid el 7, Galicia, País Vasco, Castilla-La Mancha, La Rioja, Aragón y Ceuta el 8 de septiembre, Canarias y Castilla y León el 9 de septiembre, y en último lugar la Comunitat Valenciana con Extremadura, Andalucía, Asturias, Baleares y Murcia el 12 de septiembre.
Esta vuelta a las aulas tan tardía ha provocado quejas ya de familias que consideran contradictorio que desde la administración se manden mensajes a favor de la conciliación de la vida laboral y familiar y a la vez se empiece el curso el día 12 cuando muchos padres y madres trabajan ya desde el 1 de septiembre y tienen dificultades para poder hacerse cargo de los hijos que aún están de vacaciones.
Desde la conselleria de Educación que dirige Raquel Tamarit de Compromís no se ha planteado por ahora ningún adelanto de fechas para próximos cursos, pero las familias empiezan a apretar este debate y no entienden que haya hasta diferencias de una semana en la vuelta al cole entre unas comunidades y otras.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reconoció en la apertura de curso de esta región que está dispuesta a estudiar que las clases se inicien en la región el primer día de septiembre en los próximos cursos, un guante que por ahora nadie ha recogido o contestado desde la Comunitat Valenciana, pero que sirve de argumento a las familias y de presión a la conselleria de Educación para avanzar el inicio de un curso que este año además ha ido con polémica por la suspensión judicial de la enseñanza por ámbitos en primero de la ESO -los colegios no sabían que criterio aplicar y han decidido cada uno- y por la pérdida de 8.700 alumnos como consecuecia de la baja natalidad.