Catalá señala a Puig que “los derrochólicos” son el Gobierno y no los autónomos
La portavoz del PPCV acusa al presidente de “estar en el metaverso” y que “derrochan millones en memoria histórica o catalanismo mientras dan cero a pobreza energética o cáncer infantil"
María José Catalá y Ximo Puig en la sesión de control
“Los derrochólicos”, la polémica campaña que ha puesto en marcha el ministerio de Transición Ecológica pidiendo que los ciudadanos, por ejemplo, no pongan la calefacción tan alta para ahorrar -comparándolos con alcohólicos y frivolizando este problema con numerosas críticas-, se ha colado en la sesión de control al gobierno valenciano en las Cortes Valencianas en el cara a cara entre el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y la portavoz del PPCV, María José Catalá.
Catalá ha indicado, en un discurso que ha personalizado en comerciantes como Juanjo o Justo, que “los hosteleros están con la luz al cuello, los panaderos se van a manifestar, un panadero del Cabanyal ha pasado de pagar 3.000 a 7.000 euros en luz, y desde la Generalitat no han dado ninguna solución. Todo lo contrario: se han subido el sueldo 3.000 euros, han disparado el sector público a 3.900 millones de euros, han creado 5 nuevos chiringuitos y van a recaudar 2.100 millones más en impuestos. ¿Es eso ayudar a la gente que está con el agua al cuello?”.
“El ministerio llama derrochólicos a los ciudadanos que no pueden encender la calefacción por el precio de la luz, en una campaña de muy mal gusto. Los derrochólicos son ustedes que destinan 2 millones al instituto de la memoria democrática y cero a pobreza energética, 9 millones a entidades catalanistas y cero al seguimiento del cáncer infantil”, ha relatado la portavoz del PPCV.
“Salgan de su metaverso -la famosa palabra de Tamara Falcó- y apoyen a la gente de la calle” ha pedido María José Catalá, quien ha reclamado a Puig que “sea valiente y bonifique el impuesto de sucesiones a la empresa familiar pero también para el joven que cobra 20.000 euros al mes”.
Ximo Puig, por su parte, ha defendido que las políticas de la Generalitat Valenciana “son adecuadas porque ayudan a la mayoría. Está la vía fracasada de subir impuestos y recortar o la vía de la prosperidad social” y ha considerado que su gobierno “genera confianza y atrae inversiones, realiza políticas eficaces que provocan un récord de ocupación, y tiene estabilidad con 8 presupuestos aprobados y una reforma fiscal para la mayoría”, incidiendo en que “se han dado 300 euros para ayudar a los autónomos”.