El nuevo arzobispo llega a Valencia y se estrena en Benavites como es tradición

El nuevo arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, ya está en tierras valencianas procedente de Tortosa para asumir su cargo, que se concretará en la Catedral de Valencia en una ceremonia el sábado. Y como manda la tradición, Enrique Benavent ha llegado a la localidad de Benavites, la primera parroquia de la diócesis, donde ha sido recibido por multitud de gente.

Arropado por tapices en algunos balcones y una alfombra de ramas dispuesta a lo largo de 30 metros, numerosos vecinos de Benavites como de pueblos cercanos se han acercado a saludar al nuevo arzobispo, que ha charlado animadamente con varias personas, incluido un grupo de niños, y ha saludado a las autoridades políticas y eclesiásticas que le esperaban.

En una abarrotada iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles de Benavites, Enrique Benavent ha oficiado su primera ceremonia como arzobispo de Valencia. "Vuelvo a casa, pero de manera muy diferente. Vuelvo a casa con alegría, pero también con temor porque, de alguna manera, veo que la responsabilidad es más grande que mis fuerzas, pero la Mare de Déu me da confianza y pido que sigáis rezando por mí", ha expresado el nuevo arzobispo, que es valenciano de origen, a los fieles.

“Tengo presentes a las 652 parroquias de nuestra diócesis, una diócesis muy diversa, de ciudades y de pueblos pequeños, y eso significa muchos lugares en los que se vive la fe”, ha indicado Enrique Benavent, rezando "por todas las realidades ecleasiales".

El nuevo arzobispo de Valencia ha indicado que "estoy convencido de que estamos en un momento en el que no es fácil el anuncio del Evangelio", pero ha subrayado que en sus años como sacerdote “ha podido ver mucha fe vivida en Valencia”.

"A veces da la impresión de que no se ve, pero en realidad hay mucha vida cristiana", ha reivindicado Enrique Benavent, y ha pedido que la Mare de Déu dels Desamparats que le dé confianza en su tarea.