La presión de las protestas sanitarias llevan a Sanidad a abrir una negociación
La Conselleria ha convocado una mesa sectorial a petición de los sindicatos con un calendario lleno de concentraciones y huelgas.
El conseller de Sanidad, Miguel Mínguez.
Los profesionales sanitarios llevan advirtiendo mucho tiempo. La saturación hospitalaria a la que se enfrentan como consecuencia de la falta de personal y de las condiciones laborales ha llevado al colectivo al extremo. También al deterioro de la calidad asistencial de los pacientes que se materializa en las largas listas de espera y el colapso de los servicios de Urgencias y Atención primaria de forma generalizada.
La presión por las concentraciones en el hospital de la Ribera, en Alzira, en el Hospital de Vinaròs, así como las próximas convocadas en la Fe de Valencia o la huelga general del Sindicato Médico prevista para el mes de enero parecen surgir efecto.
La Conselleria de Sanidad ha convocado para el próximo 23 de diciembre una mesa sectorial para negociar la implantación de mejoras laborales y del sistema sanitario, a instancias de la mayoría sindical y tras reunirse representantes de los sindicatos con el conseller de Sanidad, Miguel Mínguez.
Los sindicatos Satse, CCOO, UGT, CSIF e Intersindical Valenciana, que representan a casi al 95 por ciento de los trabajadores y trabajadoras de la Conselleria de Sanidad, han informado del resultado de la reunión que, "con carácter de urgencia", se celebró este miércoles por la tarde, a petición de las centrales sindicales con el conseller de Sanidad.
En la mesa sectorial "se negociará la implantación de medidas que mejoren las condiciones laborales del conjunto de trabajadores y trabajadoras de la sanidad pública valenciana, que además redundarán en una mejor atención a la ciudadanía", indican los cinco sindicatos.
Tanto estos sindicatos como la administración coinciden en que la "vía de la negociación es la más óptima en este momento" y sostienen que se deben dejar las medidas "de presión como último recurso, en caso de bloqueo de las negociaciones". "Es el momento de negociar", apuntan.