La portavoz de Sánchez se enfrenta a Puig: “no defiende el interés general”

El trasvase Tajo-Segura y la decisión del ministerio de Transición Ecológica que dirige Teresa Ribera de eliminar la disposición que establecía revisar el trasvase en 2025 antes de modificar el caudal ecológico -lo que se consideraba una garantía- ha generado una guerra del agua dentro del PSOE que amenaza con pasarle factura al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, en un tema que puede hacerle perder votos en la provincia de Alicante a meses de elecciones.

Ximo Puig no está dispuesto a que el conflicto del trasvase Tajo-Segura se convierta en la puntilla que le haga perder las elecciones en la Comunitat Valenciana donde las encuestas dan un escenario muy ajustado, y anunció que se dirigirá al Consejo de Estado para conocer el decreto del Tajo-Segura y solicitar alegaciones, recordando que se está “incumpliendo lo acordado” con él en diciembre, o dicho de otro modo, que el Gobierno le ha engañado.

Sin embargo, parece que la postura de Ximo Puig no ha sentado muy bien en el Gobierno de Pedro Sánchez. La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, desde Ciudad Real -Castilla-La Mancha, la comunidad en conflicto por el Tajo-Segura y que sale beneficiada de la decisión del Gobierno- , ha defendido la portura del Ejecutivo de Sánchez, señalando que “hay unos informes que han sido aprobados por la mesa del agua y elevados al Consejo de Estado”.

Isabel Rodríguez no se ha quedaso ahí, sino que ha defendido que lo que trata de hacer el Gobierno es poner al río Tajo un nivel de caudal ecológico que no tenía hasta ahora “para dar cumplimiento a la normativa europea y a las sentencias del Tribunal Supremo”.

Y en un dardo final a Ximo Puig sin admitir que se ha incumplido lo acordado con él, la portavoz de Sánchez ha afirmado que “el presidente de la Generalitat Valenciana defiende el interés de su comunidad autónoma y el Gobierno, del conjunto de nuestro país”, o lo que es lo mismo, que Puig sólo mira por sí mismo y no por el interés de todos.

Ximo Puig, mientras tanto, en declaraciones a Onda Cero, ha pedido a la ministra Teresa Ribera que rectifique y que "lo que se acordó en el Consejo Nacional del Agua debe mantenerse", algo que el Gobierno por su parte niega. Ximo Puig se muestra a favor del diálogo para "intentar llegar a un acuerdo" y huir de los enfrentamientos territoriales, dentro de lo que en su día se acordó.

Ahora, la pelota está en el tejado del Consejo de Estado al que ha apelado Ximo Puig, donde su presidenta, la socialista Magdalena Valerio, ex ministra de Trabajo, ha sido concejala en Guadalajara y diputada en Castilla-La Mancha, algo que tampoco juega en favor del presidente valenciano, pues Valerio podría ser más proclive a los intereses de otro socialista, Emiliano García-Page.