Las ITV denuncian la "coacción" de la Generalitat con la reversión "bananera"

La tensión entre las ITV y la Generalitat está al límite. A medida que se acerca la fecha para la finalización de los contratos de las entidades concesionarias de las ITV, crece la conflictividad entre las mismas y la Generalitat. Desde la Conselleria que dirige Rafael Climent se ha optado por la mano dura para llevar a cabo la reversión pública frente al diálogo y al consenso. Climent, que se ha negado a atender a las concesionarias según estas, enviará los próximos días 25 de febrero y 3 de marzo a agentes de la policía autonómica a ejecutar la reversión. Una forma de actuar que desde la Asociación de Entidades Concesionarias de la Comunidad Valenciana (AECOVA-ITV) ven más propia “de una república bananera”.

AECOVA-ITV viene alertando desde hace semanas que la Generalitat “no está preparada” para asumir el servicio ya que todavía no ha llevado a cabo los trámites básicos ni tampoco ha trasmitido la hoja de ruta a las concesionarias. En más de una ocasión la Asociación ha solicitado reunirse con la Conselleria y, en última instancia, con Ximo Puig para abordar el proceso conjuntamente.

La Conselleria ha pasado de pedirles a través de una resolución que continúen ofreciendo el servicio hasta junio, a amenazar con llevar a los tribunales a las entidades que se opongan y, ahora, a enviar a la policía para ejecutar la reversión pública en el plazo inicial.

Desde el Consell, el vicepresidente Héctor Illueca ha defendido la actuación policial. “El diálogo no puede estar reñido con la voluntad política de avanzar en la reversión de los servicios públicos”, ha expresado Illueca.

Por su parte, el presidente de AECOVA ITV, Francisco Llopis, critica “la coacción” con la que la Generalitat aborda la reversión al enviar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado a las estaciones de ITV.