¿Qué supone que el Valencia C.F. se convierta en Bien de Interés Cultural?
La BIC tiene como objetivo proteger el patrimonio y promover la cultura de los dos equipos deportivos más antiguos de la ciudad: Levante U.D. y Valencia C.F.
PSPV y Compromís, ambos partidos al frente del Ayuntamiento de Valencia, quieren proteger la “simbología, identidad y colores”, es decir, los aspectos patrimoniales e identitarios, de los clubes centenarios de la ciudad: Levante U.D. y Valencia C.F. Libertad VCF, plataforma que lucha contra la actual gestión del Valencia, ha sido la que más ha luchado para que esta propuesta salga a flote debido a la situación actual que atraviesa el club más importante, a nivel económico y social, de la ciudad.
El objetivo de la BIC (declaración de Bien de Interés Cultural) es proteger, conservar, difundir y fomentar el patrimonio cultural valenciano. En este punto, desde Libertad VCF consideran que la historia del club, en este caso el Valencia C.F., ha demostrado que la entidad ha ejercido un papel clave a la hora de divulgar la marca de la ciudad y ha jugado un papel clave a nivel económico, además de ser un nivel identitario de la sociedad valenciana. Por todas estas razonas, desde la asociación que lucha por liberar al club ‘ché’ de las garras de Peter Lim, tienen esperanzas de conseguir su objetivo.
Si el Valencia se convirtiera en BIC se obligaría a los propietarios a conservar y mantener la integridad de su valor cultural, aportar toda la información que se requiera por la Generalitat Valenciana sobre el estado de los bienes y facilitar la inspección y examen de los mismos. Además, si la administración considera que el bien en cuestión, en este caso alguna de las entidades deportivas propuestas, está en peligro de destrucción y desaparición, podrá tomar cartas en el asunto y expropiarlo. Hay que tener en cuenta que, si la mala racha del Valencia se prologará y el descenso a segunda división se acabara consumando, el batacazo económico sería tal, que el club tendría graves problemas para seguir funcionando y ser viable.
Para Sandra Gómez, vicealcadesa de Valencia, quien se reunió con los representantes de Libertad VCF, “poner sobre la mesa” esta cuestión es fundamental para contribuir a la hora de garantizar el futuro de instituciones que trascienden más allá, puesto que han sido claves en la historia de la ciudad, y no se plegá a los “caprichos o decisiones” del máximo accionista.
Un ejemplo actual de club que ha sido declarado Bien de Interés Cultura es el Granada C.F., equipo al que se le intentó cambiar el escudo y algunos rasgos de su identidad y gracias a esta declaración se pudo evitar. Para Compromís, a través de su portavoz, Pere Fuset, el valor social de estos clubes es “ineludible”. “El Valencia traviesa uno de los momentos deportivos y sociales más complicados de su historia, con el equipo situado en posiciones de descenso a segunda división y sin todavía haber cerrado un acuerdo con el Ayuntamiento para finalizar el estadio”, mencionaba el portavoz. Además, esperan que esta propuesta se apruebe por unanimidad.