8M del Botànic entre insultos: Podemos llama “cobarde” y “machista” a sus socios
La izquierda valenciana vive su mayor fragmentación por la ley del sólo sí es sí. Héctor Illueca tacha de “cobardía” a Joan Baldoví y Pilar Lima acusa al PSOE de "aliarse con el machismo"
Héctor Illueca junto a Ribó y Sandra Gómez
Los partidos del gobierno valenciano, PSPV, Compromís y Unidas Podemos -conocidos como el pacto del Botànic- llegan al 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, más divididos que nunca y en un tono de absoluta bronca con reproches y descalificaciones de por medio. Y es que a tres meses de elecciones esperan cazar en el río revuelto del feminismo por leyes como la ley trans o la ley del sólo sí es sí aunque eso implique dejar en mal lugar a sus socios.
La ley del sólo sí es sí y la reforma de la misma que propone el PSOE es la discrepancia que más ha encendido los ánimos dentro del Botànic. Desde Podemos se ha sacado toda la artillería pesada para atacar al PSOE y Compromís y defender a sus colegas del ministerio de Igualdad.
Así, el vicepresidente segundo de la Generalitat Valenciana y candidato de Podemos, Héctor Illueca, aseguraba respecto a sus socios que votar la reforma de la ley del sólo sí es sí con PP y Vox es "una vergüenza" -en referencia al PSOE- y “abstenerse un acto de cobardía” -un dardo hacia Joan Baldoví de Compromís-.
La abstención de Joan Baldoví ha sido el principal flanco de los ataques de Podemos. La directora del Injuve y candidata de Podemos a Les Corts por Alicante, María Teresa Pérez, calificaba de "deplorable" la "equidistancia" del diputado de Compromís y candidato de esta formación a la Generalitat porque "hacer política es justamente lo contrario".
La portavoz de Podemos en Les Corts y candidata a la alcaldía de Valencia, Pilar Lima, señalaba a sus socios del Botànic porque “es vergonzoso ver al PSOE aliado con el machismo o la abstención cobarde de Compromís para retrasar esa victoria”.
Y en medio de este cruce de reproches, la consellera de Justicia, la socialista Gabriela Bravo, echaba más sal a la herida desmontando el famoso “consentimiento” que desde Podemos defienden como la base de la ley del sólo sí es sí, indicando que “la carga de la prueba en una agresión no se puede invertir, aunque lo diga una ministra” y que “con el consentimiento libramos a las víctimas de tener que probar nada”. Se acercan elecciones y el 8 de Marzo es un campo de batalla más de la izquierda por hacerse con el voto del llamado feminismo.
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La consellera de Justicia de Puig calienta el 8M destrozando la ley del sí es sí