Puig deja a Mazón la caja vacía: cada valenciano debe 12.200 euros

El nuevo gobierno de Carlos Mazón en la Generalitat Valenciana empieza su andadura con una preocupación: la deuda y el déficit heredado del anterior gobierno del socialista Ximo Puig con Compromís y Podemos. “Estamos por encima de todas las comunidades, superando a la única que supera el 3% del PIB”, ha indicado la nueva consellera de Hacienda.

“A finales de 2022 la deuda pública supera los 55.000 millones de euros”, tal y como ha relatado la portavoz y consellera de Hacienda, Ruth Merino. “Esto quiere decir que cada valenciano debe 12.218 euros. Una familia de cuatro miembros tiene una deuda adquirida de unos 50.000 euros”, ha continuado ejemplificando Ruth Merino.

Ruth Merino sí ha hecho hincapié en que “la Comunitat Valenciana está infrafinanciada injustamente desde hace muchos años y eso debemos abordarlo, pero eso no es lo único que ha dado lugar a estas cifras escalofriantes y preocupantes, ha habido una gestión ineficaz del gobierno más caro de la historia”.

Además de la deuda, otro de los temas clave del Consell ha sido el agua. La consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, ha afirmado que la Generalitat "no comparte" la decisión del Tribunal Supremo sobre el recorte del trasvase Tajo-Segura y ha insistido en la “urgencia de frenarlo”. Pradas ha indicado que “los regantes merecen una respuesta firme que también venga avalada por criterios técnicos”.

El Pleno del Consell también ha aprobado los dos decretos leyes para prorrogar la reducción del 50% en el precio de los abonos y títulos multiviaje del transporte público de titularidad de la Generalitat hasta el 31 de enero de 2024 y la gratuidad para jóvenes menores de 31 años hasta final de año.