Vox renuncia a Urbanismo y Hacienda para firmar la paz con Catalá
El PP y Vox llegan a un acuerdo secreto para la gobernabilidad de Valencia que permitirá dar salida a la rebaja de impuestos.
El pulso de Vox a la alcaldesa de Valencia para conseguir entrar en el Gobierno del Ayuntamiento se repliega. En cuestión de una semana Vox ha pasado, de condicionar su voto necesario al PP si no le otorgaba competencias en el Ejecutivo, a rebajar sus exigencias y apoyar la rebaja de impuestos a cambio de nada.
Al PP de María José Catalá se le estaba haciendo cuesta arriba la gobernabilidad de la ciudad ya que el partido no cuenta con los votos suficientes para aprobar sus iniciativas en el pleno municipal por sí solos. Y es que el portavoz de Vox, Juanma Badenas, condicionó su voto a cambio de un acuerdo global que les permitiera entrar a gobernar. En la entrevista de ESdiario fue tajante y pidió "la gestión de delegaciones importantes de primera" apuntando directamente a la de Hacienda y Urbanismo. Tras la entrevista en la que Badenas cargó con fuerza contra Catalá con descalificativos, se reunieron en secreto este martes.
La alcaldesa se mantenía enquistada y en silencio, esperando a que se agotara la ofensiva de Vox. Catalá prefería un gobierno en solitario con su "socio preferente" para acordar cuestiones comunes en ambos programas electorales como la rebaja de impuestos. Para su sorpresa, ese socio se convertía en su principal opositor y se topó con el riesgo de no aprobar la mayor rebaja de impuestos de la historia de Valencia.
Tras el encuentro entre ambos líderes -donde supuestamente solo han hablado de la ordenanza fiscal según Badenas- ha cambiado totalmente la postura de Vox. En la Comisión de Hacienda celebrada este miércoles, "Vox ha votado a favor. La razón es porque supone un sustancial ahorro impositivo para los ciudadanos de Valencia y en el programa municipal de Vox estaba este punto como uno de los más importantes", ha defendido.
Por su parte, Catalá ha celebrado que "de momento hay gestos de buena disposición y por parte nuestra". "Las medidas coinciden con su ideario", ha recordado. Eso sí, no aclara si estaría dispuesta a cogobernar con Vox.
También llama la atención como venían quejándose de que la alcaldesa no atendía su petición para reunirse desde hace más de un mes, mientras que ahora Catalá ha confirmado que la semana que viene seguirán sentándose "sin parar", para desarrollar los presupuestos con "una comunicación fluida" que ya mantienen.
Esa es la gran negociación, la de los presupuestos que se debatirán en el pleno de noviembre. Pese a las continuas amenazas de Badenas, tras la misteriosa reunión Catalá se ha mostrado confiada con que "no habrá ningún problema como tampoco lo ha habido con las ordenanzas".
Vox parece haber renunciado a Hacienda y Urbanismo. Ha negado haber exigido concejalías al PP a cambio de apoyar las cuentas anuales, pese a decantarse en la entrevista de ESdiario, donde además aseveró que "no vemos posible que los presupuestos (del PP) sean positivos" y que "no le daremos un cheque en blanco". En cambio, ahora no solo no ha propuesto ninguna modificación a la rebaja de los tributos municipales, sino que se ha comprometido con que "si los presupuestos de 2024 son beneficiosos, estudiaremos la posibilidad de aprobar las cuentas".
Badenas justifica el giro en su postura con que "la semana pasada no conocíamos las ordenanzas. Fue anteayer cuando tuvimos el texto completo para estudiar en tiempo récord y por ello hemos podido tener esta mañana una postura".
No obstante, el PSPV lo atribuye a que en la reunión entre PP y Vox -con la inusual participación del diputado nacional y presidente provincial, Gil Lázaro- ya se ha sellado un "acuerdo de Gobierno encubierto" que recuerda al de Mazón en la Generalitat. "Es obvio que ese acuerdo globa ha llegado y también es obvio que nos lo están intentando ocultar, ha acusado la portavoz socialista, Sandra Gómez. "Estamos asistiendo a un engaño público", ha espetado antes de preguntar "¿A cambio de qué la señora Catalá ha negociado que salga adelante su proyecto fiscal y a cambio de qué ha troceado este Ayuntamiento para obtener ese voto favorable". Tanto Gómez como Papi Robles (Compromís) se han mostrado convencidas de que Vox entrará al gobierno del Ayuntamiento. "Empezamos a oler que por fin van a conseguir que la banda entre en el Ayuntamiento. Las presiones de Vox marcan la deriva", ha valorado.