La Intervención destapa "posible fraude" en la gestión de Ximo Puig
Carlos Mazón activará una auditoría para depurar " posibles responsabilidades legales y penales"
El gobierno de Carlos Mazón encargará una auditoría general de todo el sector público instrumental de la Generalitat Valenciana ante "posibles casos de fraude y gasto descontrolado" por parte del anterior gobierno del Botànic de Ximo Puig. Mazón ha advertido de que, en caso de confirmarse, exigirán "responsabilidades administrativas y penales".
La situación de las empresas y entidades públicas "es crítica", ha alertado. Los informes de la Sindicatura de Cuentas y la Intervención de la Generalitat desvelan "facturas en cajones, contratos a dedo, personal no autorizado, gastos sin control y transferencias bancarias sin titular", ha denunciado el 'president'.
22 de las 48 entidades sujetas a este tipo de verificación se detecta "riesgo alto" de área de controles de pagos sin autorización de la persona correspondiente o a cuentas bancarias no identificadas. "¿Sabía el Botànic a quién le hacía las transferencias?", se ha preguntado Mazón, denunciando también que "el 96% del sector público no cumple la ley" ya que, según los informes, en materia de contratación sólo 4 de las 54 entidades han recibido una valoración positiva.
Concretamente, la Intervención ha detectado que el Botànic adjudicó "a dedo" 54.122 contratos por valor de 713 millones de euros y también 159 millones "a dedo" en contratos menores. Se trata de , en palabras de Mazón, "un pozo sin fondo de contratación a dedo, una barra libre que abrió el Botànic".
Además de los procedimientos de contratación "irregulares", la Intervención alerta de la falta de control en el manejo de recursos de publicidad, duplicidades de gato, retribuciones a directivos colocados a dedo al margen de la ley y pagos a terceras personas sin control ni autorización. "El sector público del anterior gobierno se dedicó a gastar sin control en aspectos de dudosa legalidad y que hoy anunció que vamos a investigar", ha declarado el presidente Carlos Mazón.
La plantilla de trabajadores que accedieron a la administración a través de concurso público se incrementó un 35% con el Botànic y el gasto en personal se disparó un 47%, es decir, que el coste en nóminas pasó de 400 millones a casi 600 millones en tan solo el último año de gestión del Botànic y "en muchos casos sin autorización". Solo en 2021 se han producido más de 4.000 contrataciones no autorizadas por la Dirección General de Presupuestos de la Generalitat.
Por otro lado, la Intervención alerta de los chiringuitos creados por PSPV y Compromís durante su mandato. El informe señala directamente a seis entidades con funciones aisladas que ya ejecutaba alguna dirección general, lo que implica "duplicidades por tareas ya prestadas". A juicio de Mazón, una forma de "dejar la puerta abierta" a más "enchufes masivos". Dichas entidades que no han llegado a activarse ni cuentan con presupuesto son: la Agencia Valenciana de la Energía, la Agencia para la Digitalización, la Agencia Valenciana para el Control Alimentario, la Agencia Valenciana de Residuos, la Agencia Valenciana de la Lucha contra el Cambio Climático y la Agencia Valenciana de Función Pública. El Gobierno de Mazón eliminará o restructurará dichas "empresas fantasmas" sin perjuicio para los trabajadores que pasarán a desempeñar sus labores en las Direcciones Generales correspondientes.
"LA VERDAD DEL BOTÀNIC"
Ante las "graves alertas", Mazón ha anunciado que la Generalitat- con coordinación de la Intervención General y la Dirección General de la Conselleria de Hacienda- se activarán dos auditorías generales con el objetivo de dar a conocer a los "ciudadanos la verdad" y en qué "se gastan sus impuestos y tener tranquilidad de que cada euro se gasta por lo marcado por ley".
Con este procedimiento técnico se pretende detectar "posibles casos de fraude y gasto descontrolado" y "exigir donde haga falta las responsabilidad administrativas y penales en las que se haya podido incurrir", ha advertido Mazón. Se analizará "factura por factura", ha avanzado Mazón con miras de obtener resultados parciales a medida que avance el año y las conclusiones finales a final de este 2024.
En línea con la ya ejecutada reducción del gasto político del gobierno de Mazón, ha aseverado que "la época de acumular empresa públicas para pagar favores y ejecutar enchufes masivos se ha acabado". "Dijimos que podríamos fin al gobierno más caro de la historia y el cambio se cumple", ha afirmado concluyendo que con la auditoría general se aclarará el "ocultismo" del Botànic y se conocerá si "es constitutivo de algún delito".