Tres rivales para liderar el PSPV abren heridas: ¿Y ahora qué?
Sin acuerdos sobre la mesa en el PSPV, habrá primarias a tres como en Andalucía y Ferraz podría imponer un candidato no ganador para las elecciones como en Galicia.
La etapa de estabilidad durante los trece años de Ximo Puig al frente del socialismo valenciano abre paso a una 'guerra' de facciones para liderar la renovación del partido. Pese a la voluntad de unidad, tanto de Puig como de los candidatos, la realidad no deja de ser otra que tres contrincantes -el secretario provincial de Alicante, Alejandro Soler, el de Valencia Carlos Bielsa y la ministra Diana Morant-medirán sus fuerzas en la campaña que reabre heridas del pasado.
Lo que a Ximo Puig le hubiera gustado y ese era su objetivo final antes de abandonar definitivamente el partido, es una transición "tranquila". Así lo ha manifestado él mismo en distintas ocasiones, pese a ser el propulsor de las primeras primarias de la historia del PSOE. Unos comicios, por cierto, en los que su rival Toni Gaspar (expresidente de la Diputación) empleó una sarcástica campaña "caminando entre dinosaurios" acompañada de imágenes de estos animales ancestrales para atacar la edad de Ximo Puig.
Sin embargo, la candidata apadrinada por el propio Ximo Puig y Ferraz, la ministra Diana Morant, no ha contado con la misma suerte que el exministro Salvador Illa en Cataluña y le ha salido competencia. Con la presentación de candidaturas, este lunes arranca la 'guerra' oficial. Durante un mes -hasta la votación del 25 de febrero- se agravarán las fracturas entre el 'abalismo' (del exministro José Luis Ábalos) a favor de Alejandro Soler, el 'ximismo' respaldando a Morant y los apoyos valencianos a Carlos Bielsa, el alcalde socialista más votado de España en las municipales. La contienda política puede derivar en varios escenarios posibles con precedentes en otras autonomías.
Si los tres candidatos valencianos no alcanzasen un acuerdo y eliminan "el sectarismo y las familias" como ha pedido este fin de semana la ministra Diana Morant, se batirán en unas primas a tres como en Andalucía. Un proceso doloroso para los sectores derrotados de Díaz y Hierros con la victoria de Espadas que no sirvió para recuperar la Junta. Es más, aún surgen dudas sobre su continuidad por su derrota y su compatibilidad con la portavocía del Senado, similar a la situación de Diana Morant y las voces críticas que ponen en duda la posibilidad de compaginar su liderazgo para las próximas elecciones y su cargo de ministra.
Más allá de las familias internas del PSOE, aunque no lo es todo, la configuración territorial juega un papel importante en la Comunidad Valenciana que recuerda a Galicia, donde las primarias de 2021 también abrieron heridas. Valentín González Formoso contaba con el apoyo de la militancia del norte de Galicia y Gonzalo Caballero con los votos del sur como sus homólogos valencianos Alejandro Soler (Alicante) y Carlos Bielsa (Valencia).
Sin embargo, que Formoso se alzase con la secretaría general no supuso proclamarse el candidato a las elecciones autonómicas. Finalmente, el elegido por Pedro Sánchez para intentar recuperar Galicia en las próximas elecciones del 18 de febrero es González Besteiro, anulando las aspiraciones de Caballero.
Esta fórmula podría repetirse en la Comunidad Valenciana con un Alejandro Soler como secretario general al contar la mayoría de los avales de la militancia hasta el momento, y Diana Morant como candidata preferida de Sánchez para batirse con Carlos Mazón en las próximas elecciones.
Cualquiera de estas situaciones supone la falta de unidad en el PSPV, una brecha que se agrava no solo en la cúpula sino también entre la militancia e incluso simpatizantes que asumen un líder no deseado con una herida final para los perdedores difícil de sanar. Por ello, el gran reto desde este lunes hasta el 25 de febrero se centra en las negociaciones entre los candidatos para alcanzar un posible pacto al tiempo que movilizan sus campañas.