Prisión permanente revisable para el parricida de Sueca
Los cargos imputados han sido: autor de un delito de asesinato hiperagravado, cualificado por la alevosía y el ensañamiento, y con las agravantes de parentesco y de discriminación por género
El parricida de Sueca, quien mato a su hijo de forma brutal, le llegó a asestar cerca de 70 puñaladas en el cuello, mientras obligaba a su madre a escuchar sus gritos por teléfono, ha sido condenado por la Audiencia de Valencia a prisión permanente revisable tal como solicitaba la Fiscalía y la acusación particular. La magistrada le impone la condena como autor de un delito de asesinato hiperagravado, cualificado por la alevosía y el ensañamiento, y con las agravantes de parentesco y de discriminación por razón de género, en concurso ideal con un delito de lesiones psíquicas.
El tribunal popular le halló responsable de haberle clavado "brutal y repetidamente" un cuchillo de forma inesperada al niño, que carecía de toda posibilidad de defensa, en una acción con la que buscó no solo la muerte del hijo común con su exmujer, sino además causar con ello "el mayor dolor psíquico posible" a la madre, a la que causó graves lesiones psíquicas que, a día de hoy, siguen pendientes de curación.
Para la magistrada, según la sentencia, la prueba practicada en el juicio se estima válida para ser tomada en consideración por el tribunal del jurado en sustento de su veredicto. Así, señala que la resolución condenatoria "se sustenta en una detallada y completa valoración de la prueba", ponderada "de forma conjunta y entrelazada entre sí, de forma razonada y razonable, lógica y no arbitraria ni errónea".
En este sentido, el jurado constató la voluntad de matar del padre de matar al niño al que asestó 68 cuchilladas, 27 de ellas penetrantes (no cortantes), en su mayoría en la zona del cuello del menor, que se encontraba "con absoluta indefensión" y que fue una muerte "innecesariamente dolorosa", con la finalidad de causar a su exesposa "el mayor dolor de todos los imaginables, convirtiendo la muerte de su hijo en un paradigmático acto de violencia machista vicaria".
Esto es algo que el propio acusado reconoció al declarar que "si no se hubieran separado no hubiera ocurrido el delito"; porque cuando ella en marzo de 2021 le reiteró su intención de separarse, él advirtió a su cuñado: "que se prepare tu hermana. Ahora voy a ser malo, voy a ser mala persona" y por la "perversidad" de haber propiciado que la madre oyese morir a su hijo, al dejarle que la llamara en el momento del crimen.
Condena
La magistrada presidenta del tribunal del jurado le impone la condena como autor de un delito de asesinato hiperagravado, cualificado por la alevosía y el ensañamiento, y con las agravantes de parentesco y de discriminación por razón de género, en concurso ideal con un delito de lesiones psíquicas.
Además, le impone la prohibición de acercarse a un radio no inferior a dos kilómetros a la madre del menor a cualquier lugar donde se encuentre; a su domicilio; lugar de trabajo o cualquier sitio por ella frecuentado por un tiempo superior en 10 años al de la duración de la condena, la prohibición de residir o acudir a la localidad de Cullera por el mismo periodo y comunicarse con su exesposa de cualquier forma.
De igual modo, le condena a la medida libertad vigilada por tiempo superior en 10 años al de la duración de la pena de prisión; a dos años y cuatro meses por el maltrato psíquico y físico habitual a la exmujer cometido en la vivienda común; a diez meses de cárcel por maltrato físico con lesión menos grave y a otros dos años más de cárcel -y cinco de prohibición de acercarse a su exmujer- por amenazas no condicionales, con las circunstancias agravantes de haberlas cometido por motivo de discriminación de género y de parentesco; y diez meses más de cárcel por delito continuado de quebrantamiento de condena.
Por vía de responsabilidad civil, deberá indemnizar a la madre del niño con 500.000 euros por los daños morales causados y en otros 450 euros más por los daños morales causados por el maltrato físico y las amenazas causadas el día 13 de marzo de 2021, cuando ella le reiteró su voluntad de divorciarse.
Durante la vista, el hombre reconoció haber matado al menor tras agarrarle del cuello: "Le clavé el cuchillo varias veces", dijo, al tiempo que aseguró que el asesinato no se habría producido si su expareja hubiera frenado los trámites de divorcio. También llegó a confesar que permitió al niño coger el teléfono móvil a su madre mientras le acuchillaba y alegó que ese día iba ebrio, un argumento excluido por el jurado.
comunidad-valenciana/valencia
"Le clavé un cuchillo": El parricida de Sueca confiesa cómo mato a su hijo