El futuro del Teatro Principal en vilo por los daños estructurales "graves"
La construcción del siglo XIX requiere una rehabilitación millonaria para reparar grietas, deformaciones, movimientos del hormigón y ataques de termitas.
El Teatro Principal, el buque insignia de la cultura valenciana, presenta graves deficiencias y requiere una rehabilitación de al menos 40 millones de euros o, de lo contrario, se verá abocado al cierre. El Plan Director que evalúa los daños al que ha tenido acceso ESdiario alerta de "problemas estructurales" como el hormigón armado de un sector del edificio que "se está separando de los muros de fábrica" y generando "tensiones y deformaciones inadmisibles", además de un "fallo global de falta de elementos de carga que puede generar movimientos". Las fuentes de la Diputación de Valencia consultadas confirman que se está estudiando la solución para "salvarlo".
El estudio histórico-arqueológico al que ha tenido acceso ESdiario, revela una serie de daños y problemas recurrentes. Este Plan Director advierte de defectos "preocupantes" localizados como los "ataques de termitas que ha perjudicado a la ventilación y "favorece la pudrición" en estructuras de madera, de las grietas en las escaleras o la tabiquería y fisuras en el forjado, el telón "antiincendios", el área telefónica anclada a una barandilla o las "deformaciones y movimientos en el foso" y "elementos que han superado su vida útil y requieren una sustitución urgente". Pero también deficiencias generalizadas como múltiples "fallos de diseño constructivo que están favoreciendo la proliferación de daños".
A ello se suma el "incumplimiento de los requisitos de protección frente a incendios" como la falta de salidas de evacuación, la "falta de accesibilidad", el "problema severo" de comunicaciones o problemas de instalaciones o de gestión de usos de los diferentes espacios auxiliares del edificio (oficinas, cafetería, aseos, camerinos...)".
Se ha dado una sucesión de intervenciones en el edificio que se halla superpuesto a la muralla andalusí de Valencia. De hecho estas modificaciones han traído perjuicios al eliminar elementos de carga. Sin embargo, en las últimas legislaturas del anterior gobierno del Botànic (PSPV-Compromís-UP), no se ha llevado a cabo ninguna reforma sustancial. La última fue la actualización del sistema aire acondicionado en 2013. De hecho, el informe señala que "ha existido una clara falta de mantenimiento y de control por parte de la Diputación".
40 millones de euros para "salvarlo"
Esta construcción que data del siglo XIX supone un gran valor patrimonial y arqueológico por la conservación de secuencias estratégicas de la época medieval de la ciudad. Por este motivo y porque se trata del teatro donde la Conselleria promueve la mayoría de la actividad culturar, el objetivo tanto de la Generalitat como de la Diputación de Valencia es rehabilitarlo, pero se trata de una desafiante obra colosal que supone una gran inversión que todavía no ha dado con la fórmula para acometerla al tiempo que continúan celebrándose las representaciones y funciones teatrales.
El presupuesto de la ejecución del material para la rehabilitación es de 29.547.649 euros. A ello se debe sumar el IVA, el beneficio industrial y los gastos generales, lo que suman un coste total de 40 millones de euros, eso sin actualizar los precios fijados en 2022 que se han incrementado con la inflación dos años después.
La propiedad recae sobre la Diputación de Valencia y no de la Conselleria de Cultura, pese a que ostente un 50% de la cesión del suelo, dado que la fecha de su construcción es anterior a la creación de las comunidades autónomas. Por ello, desde la Generalitat se recuerda que "la decisión la tiene la Diputación". Para hacer frente a la obra, la Generalitat Valenciana le tienden la mano a la corporación provincial económicamente para "colaborar para salvarlo".
La primera reunión entre administraciones no ha marcado ninguna hoja de ruta, pero sí ha servido como acuerdo de intenciones. Desde la Diputación de Valencia afirman a este diario que no se contempla la opción del cierre, aunque reconocen que de no abordarse de forma urgente la reforma este sería su trágico devenir. Para tratar de evitarlo, actualmente se está estudiando de forma conjunta entre la corporación provincial y la Conselleria la posibilidad de abordar el proyecto por instalación o por fases y con vistas de contratar la redacción de proyecto de ejecución.