Nueve de cada diez valencianos acuden al nutricionista por sobrepeso
Uno de cada dos valencianos adultos padecen obesidad o sobrepeso y la población infantojuvenil es la que peor come
Nueve de de cada diez valencianos y valencianas que pide cita por primera vez al nutricionista lo hace por problemas de exceso de masa grasa, según se desprende de un estudio realizado por los profesionales que analiza los principales hábitos de alimentación y las carencias en la dieta por edades.
Al respecto, el presidente del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana ,Luis Cabañas, explica que han detectado que han aumentado los casos de obesidad y sobrepeso entre los pacientes que acuden al nutricionista.
Así, el exceso de peso continúa representando uno de los principales problemas de Salud Pública en la Comunitat Valenciana. De hecho, una de cada dos personas adultas la padecen, según la última Encuesta de Salud de la Conselleria de Sanitat y, en el caso de la población de 5 a 14 años, los datos del estudio ENPIV del CODiNuCoVa demuestran que el 23% de los menores valencianos padecen de exceso de peso. "Esta tendencia al alza que hemos detectado en consulta es una realidad cada vez más visible", explica Cabañas, que advierte de que "un niño con problemas de exceso de peso hoy es un adulto con una patología el día de mañana", explica Cabañas.
Aunque el perfil mayoritario de los pacientes que acude a consultas de nutrición son mujeres, se ha detectado "un aumento significativo" de hombres que acuden, en la mayoría de los casos, para mejorar su alimentación relacionada con la práctica deportiva. Así, en 2023 la mayoría de los hombres que acudieron a consulta con el nutricionista lo hizo para ganar en masa muscular o porque practica un deporte de manera habitual y quiere complementarlo con una correcta alimentación. No obstante, también crecen los hombres que acuden al nutricionista para lograr una pérdida de peso asociado exceso de masa grasa", explica Luis Cabañas.
La Población infantojuvenil, la que por come
La tercera edición del Informe '¿Cómo comemos en la Comunitat Valenciana?' ha analizado los hábitos de alimentación según franjas de edad. Tal y como ocurría hace dos años, los niños y los jóvenes continúan siendo la franja de población cuya alimentación es peor valorada por los expertos en Nutrición.
María Alonso, miembro del departamento de Proyectos del Colegio Oficial, explica que "esto ocurre principalmente por la falta de tiempo para cocinar y planificar los menús en las familias, lo que deriva en "una peor calidad y diversidad de alimentos". A esto, se suma la falta de educación alimentaria en las familias", apunta.
Los datos aportados por el CODiNuCoVa demuestran que las comidas menos saludables entre los menores de 18 años son el desayuno y la merienda. "Son dos momentos del día en que se consumen productos con alta cantidad de azúcar, sal o grasas de mala calidad, hasta el punto de que nos encontramos con que los más pequeños de la casa han superado la ingesta de azúcar recomendada para un día sólo con el desayuno", explica la nutricionista.
En cuanto a los alimentos o productos más consumidos, en la etapa infantojuvenil, aumenta la presencia de bollería y ultraprocesados en la dieta, y se sigue teniendo importantes carencias en cuanto a consumo de fruta, verduras y hortalizas, legumbres y pescado. En definitiva, "una suma de situaciones que colocan a los más pequeños como los que peor se alimentan", indica Alonso.
Un cambia de hábitos entre los 31 y 45 años
Una vez superada la barrera de los 30, los valencianos experimentan un cambio en sus hábitos saludables con respecto al último informe presentado hace dos años. "Esta es la edad más frecuente en consulta y hay un cambio de paradigma: ya no sólo piensan en pesar más o menos, buscan un cambio en su estilo de vida y en su dieta para hacerla así más saludable y encontrarse mejor", explica Luis Cabañas.
El Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de la Comunitat Valenciana ha detectado que la dieta en la etapa de los 31 a 45 años cambia, cobrando más protagonismo alimentos como las verduras y hortalizas o la carne. Desaparece prácticamente el consumo de alimentos ultraprocesados y comida basura y empiezan a optar más por alimentos frescos.
"Son quienes más y mejor acceso tienen a la información actual, y han creado conciencia. También es una franja de edad en la que empiezan a aparecer patologías típicas de edades mayores y la preocupación provoca un cambio en los estilos de vida, sumado a que se reconoce la figura del dietista-nutricionista como profesional competente para esa promoción de la salud", comenta.
Los mayores de 45, los que mejor se alimentan
A partir de los 45 años, llega la estabilidad y la dieta saludable. "Hay un aumento en el consumo de alimentos frescos, muy relacionado a mayor poder adquisitivo: carne, pescado, frutas, verduras y hortalizas y, en líneas generales, su alimentación es más variada y equilibrada", explica María Alonso.
Sin embargo, en personas mayores de 60 años empieza a pesar más la soledad, los cambios de ritmo vitales o el cansancio y la falta de interés por cocinar, especialmente vinculada a esa soledad y entre la población mayor de 75 años también observamos que las limitaciones físicas y la falta de memoria puede afectar en una peor alimentación, concluye el informe.