El foco real de la violencia: Un 162% más de asesinatos

Los crímenes en la Comunidad Valenciana se incrementaron un 162'5% y las violaciones un un 39% más. Son los datos del Ministerio de Interior que se dieron a conocer hace un mes, pero que cabe refrescarlos para que no caigan en el olvido. La inseguridad en las calles vinculado al abrumante incremento de la delincuencia es el problema real donde debe situarse el foco del debate para los legisladores, pero lejos de abordar la situación, el PSOE en la Moncloa niega la crisis y los dirigentes socialistas valencianos desvían la atención montando un relato tremendista por el nombre dado a un curso para policías locales, que a su vez se ha convertido en la preocupación máxima del Ministerio que excarcela a violadores. 

Agresiones sexuales con penetración, delitos contra la libertad sexual, lesiones y riña tumultuaria, robo de vehículos, tráfico de drogas. Todos los tipos de delincuencia suben, excepto los hurtos que descienden porque cada vez son más violentos y se sustituye por un incremento de robos con violencia e intimidación.

Y mientras las calles se tornan cada vez más inseguras y sangrientas, especialmente en la Comunidad Valenciana, lo que se cuece en la sede del PSPV no es cómo solucionar el problema, ni el exigir a sus jefes de Madrid más agentes de policía y parar el desmantelamiento de los cuarteles de la Guardia Civil, ni elaborar propuestas legislativas en materia de seguridad ciudadana y educativa atajando el problema en edades tempranas; la preocupación máxima, en cambio, es la terminología empleada en un curso de policía, que por mucho que deje de llamarse "de violencia de género" y se denomine "violencia intrafamiliar" no deja de ser la misma formación que antes con los mismos contenidos. 

Nada es casual, el PSOE valenciano saca más rédito político desviando la atención hacia esa desafortunada decisión de Vox vendiendo un relato dramático llegando a exaltar que por ello el gobierno PP-Vox "va en contra de la democracia y de las mujeres". Le extraen más beneficios que al reconocimiento de la existencia de una crisis de inseguridad nacional para la cual su partido en el Gobierno no da respuesta y que pondría en evidencia al ministro Fernando Grande-Marlaska. 

Este escenario apocalíptico que plantea el PSPV se aleja de la realidad, pues el discurso de Vox contra la ideología del género no se materializa en medidas. La Comunidad Valenciana mantiene el sistema de protección a las víctimas de violencia de género, VioGen, así como la misma formación para sus policías, que cuando gobernaba el Botànic. 

Del mismo modo, el nombre dado al citado curso de policías locales de Valenciana que pronto será corregido también es la máxima preocupación del Ministerio de Igualdad. Con el incremento incesante de casos de violencia de género, abusos sexuales, violaciones y con las asociaciones feministas en la calle protestando en las principales ciudades de España bajo el lema de "nos están matando", el Ministerio de 'Igual-da' está a otra cosa. Se esfuerza en poner el foco en cuestiones locales poco trascendentales. La sucesora de Irene Montero, la ministra Ana Redondo, ha anunciado "posibles acciones judiciales", y no para endurecer las penas de los violadores que excarceló, sino contra el cambio del nombre del curso.