Més-Compromís afronta su congreso convulso y roto: "es más fácil juntarse en una paella"

El congreso de Més-Compromís ha arrancado con un clima muy convulso entre ataques, denuncias del veto al voto, irregularidades en la inscripción y sin una candidatura clara. Este partido, al que pertenecen la mayoría de los dirigentes de la coalición de Compromís, a su vez esta formado por otras tres subcorrientes. Entre tantas sensibilidades, el partido debe decidir este fin de semana su liderazgo y su nueva hoja de ruta después de haber perdido las elecciones. 

Divididos y enfrentados. Así han llegado a Albalat dels Sorells las tres familias de Més-Compromís: 'Guanyar el País' (Amparo Piquer); 'Compromís pel País Valencià' (David González) y el proyecto político 'Reviscola', encabezado por la diputada de Compromís en Les Corts Mònica Álvaro.

Está siendo un Congreso "difícil" y con notables "diferencias", han reconocido los dirigentes que aspiran a la secretaría general. Uno de los principales puntos de conflicto es la incapacidad de llegar a un acuerdo con la candidatura. Álvaro no ha tardado en criticar que es un "error" presentar tres candidaturas: "No haber conseguido reducir el número de propuestas políticas es un error", evidenciando la fragmentación interna. "Era más fácil juntarte a hacer una paella el domingo", ha valorado. Es más, la dirigente de esta corriente crítica ha denunciado que ya en el primer día se ha producido un veto al voto. No sólo "no hemos podido votar una enmienda al reglamento", según la diputada nacionalista, sino que también ha criticado irregularidades el proceso de inscripción, pues "mucha gente se ha quedado sin poder inscribirse", lo que está incrementando las tensiones durante el Congreso.

Mientras, González ha vuelto a ratificar su "no" rotundo a pactar in extremis. El candidato de Compromís Pel País Valencià ha asegurado que "hemos hecho todo lo posible para poder llegar a dos candidaturas", pero subraya que "no ha sido posible". 

Esta fractura viene dada por no compartir "la hoja de ruta", en la que, entre otras cosas, existen discrepancias entorno a cómo debe posicionarse el partido frente a la criticada integración en Sumar, el partido de Yolanda Díaz en el Congreso, percibido como algo negativo al perder autonomía y representatidad. "Sabíamos que con la candidatura oficialista --'Guanyar el País'-- no teníamos una hoja de ruta común", ha expresado Álvaro