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"Yo estoy bien": Sánchez desde la Moncloa mientras Valencia agoniza con 211 muertos en la DANA

El presidente del Gobierno anuncia las primeras ayudas siete días después y habla sobre su estado de salud al recibir un palo en Paiporta.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante una rueda de prensa, posterior al Consejo de Ministros, en el Palacio de La Moncloa, a 5 de noviembre de 2024.E.p.

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El presidente Pedro Sánchez ha comparecido para anunciar el primer paquete de ayudas destinado a los perjudicados por la DANA, así como la declaración de Zona Catastrófica, siete días después. No ha podido evitar responder al episodio que ha dado la vuelta a el mundo y que le ha convertido en el hazmereir intermacional, huyendo de Paiporta (Valencia), dejando allí solos al Rey Felipe VI y a la Reina Letizia, tras recibir un golpe por el lanzamiento de un palo. 

"Yo estoy bien, yo estoy bien", ha reiterado hasta en dos ocasiones el presidente, desde su Palacio de la Moncloa, mientras pueblos valencianos están hundidos en la miseria, agonizando y llorando la pérdida de, por el momento, 211 muertos por. "Gracias a todos por vuestras muestras de solidaridad", ha dicho en una nueva muestra de distanciamiento con la realidad tercermundista que sufren los municipios valencianos sepultados bajo barro y escombros. Precisamente, con hipocresía ha afirmado que "no le van a desviar de lo prioritario, las víctimas" anunciado que "desde el primer momento" el Gobierno ha actuado y que va a asumir el gasto de retirada de lodo y enseres, ahora, siete días después, cuando son los vecinos y voluntarios quienes principalmente han trabajado sin cesar desenterrando sus calles.

A pie de calle no se entendió su visita en la zona cero el pasado domingo. Su presencia indignó al pueblo valenciano que estaba allí hasta los codos de barro con escobas en mano para limpiar y desescombrar los restos destrozados por la inundación. No sólo ha dado la vuelta al mundo la imagen de un individuo lanzando un palo al presidente, y este mismo huyendo del lugar, mientras los Reyes sí continuaron in situ abrazando y compartiendo el dolor con las víctimas pese a recibir una lluvia de bolas de barro. La cobardía del presidente ha sido retratada en la prensa internacional e incluso en caricaturas. 

La frialdad y el distanciamiento con la que el presidente se ha referido ahora a su buen estado de salud en el momento de mayor catástrofe natural de la historia de España en la que miles de personas lo han perdido todo ha desatado un aluvión de críticas. "Narcisista, tirano, eso es lo que le importa, vergonzoso", son algunos ejemplos de descalificativos y comentarios que ha recibido en redes sociales. 

El descontento general con el Gobierno se palpa en la calle, en cada municipio de Valencia, en cada testimonio de los afectados recogidos por los medios de comunicación. Pero Sánchez, una vez más, ha tratado de minimizarlo atribuyendo la autoría de la agresión a "un grupo completamente organizado" de extrema derecha.