Ximo Puig reconoce que su Unidad Valenciana de Emergencias no existía

El expresidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha vuelto al foco público para pronunciarse sobre los aspectos más polémicos de la gestión de la DANA. El bulo del desmantelamiento de la Unidad Valenciana de Emergencias, la falta de información sobre las crecidas de los barrancos, la tardía intervención del Gobierno de España o la exigencia de dimisiones son los aspectos que ha abordado, o tratado de esquivar, en una entrevista en À Punt.

Aunque el Consell de Carlos Mazón ha denunciado la "falta de información" sobre la crecida de los caudales de los barrancos por parte de la Confederación Hidrográfica del Júcar dependiente del Ministerio, Ximo Puig se esmera en comparar la gestión de la actual catástrofe medioambiental con el temporal de 2019 que afectó a la comarca alicantina de la Vega Baja. "Con la información que se tenía en la DANA de la Vega Baja se actuó de una manera y ahora de otra y se podía haber hecho mucho mejor", ha considerado el ahora embajador de la OCD en París. A su juicio, en lo que Mazón "falló", fue en "la preemergencia 48 horas antes". En ese momento ha destacado su presencia en el CECOPI, pero reconoce que "no de forma permanente".

Uno de los bulos, agitados principalmente por la izquierda, que han generado polémica en la gestión de la DANA, ha sido el falso desmantelamiento de la Unidad Valenciana de Emergencias. Se ha llegado a afirmar que la respuesta a la catástrofe habría sido más efectiva si el gobierno de Mazón no hubiera eliminado la unidad de bomberos especializados en emergencias. Unos hechos falsos, asumidos por el propio expresidente Ximo Puig. Ha reconocido que no existía la UVE, sino que "era un proyecto" que se encontraba "presupuestado" y con el número de plazas diseñadas, pero no estaba operativa. El objetivo era "formar" a los bomberos forestales, especialmente a "cargos intermedios" y dotarles de "instrumentos" para equipararlos a la Unidad Militar de Emergencias. Aunque el PSPV no llegó a materializar esa unidad durante su legislatura, rechaza que este proyecto paralizado fuera "un chiringuito", como así lo consideraron sus sucesores de PP y Vox. 

Otro de los aspectos que ha marcado la gestión de la DANA ha sido el papel clave del Gobierno de España, ausente en los primeros días. El ya viral "si quieren ayuda que la pidan" de Pedro Sánchez o la negativa a declarar el Estado de Alarma o la Zona Catastrófica hasta pasada la semana. La indignación de las miles de personas afectadas se ha focalizado en la tardía llegada de los militares a la zona cero. Preguntado por ello, Ximo Puig ha evitado responsabilizar a su partido en el Gobierno. Ignorando la magnitud de la catástrofe, sostiene que quien tiene que "liderar la respuesta" es el 'president' Carlos Mazón. Es, añade, el "autogobierno" de la Generalitat Valenciana quien "podía actuar de otra manera". "La proximidad ayuda a la gestión". Eso sí, diferencia que "otra cosa es" el solicitar al Gobierno de Sánchez "todos los recursos posibles". 

En la próxima fase de "reconstrucción", el exdirigente socialista espera "un cambio profundo de perspectiva" en el que el Consell: "no se puede seguir como si nada", ha dicho deslizando la necesidad de asunción de responsabilidades con posibles dimisiones de los altos cargos del Consell.