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Desaparecido Cristiano, el método Benítez explota en Sevilla

Los de Emery se convirtieron en el primer equipo que logra derrotar al Real Madrid esta temporada y todo una jornada antes del clásico contra el FC Barcelona y cediendo el liderato.

Desaparecido Cristiano, el método Benítez explota en Sevilla

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El Sevilla se convirtió este domingo en el primer equipo que derrota al Real Madrid esta temporada (3-2) en su visita al Ramón Sánchez Pizjuán, una jornada antes del ´clásico´ con el FC Barcelona, y después de haber ofrecido una pobre imagen, focalizada en el desacierto de Cristiano Ronaldo y Gareth Bale.

El ´método Benítez´ perdió su efecto a la undécima jornada --decimoquinto partido del curso-- tras caer sin discusión en el coso de Nervión. La ansiedad local encontró a su presa perfecta pese a que el guión lo comenzase escribiendo Sergio Ramos con una preciosa chilena que allanaba la cuesta para los merengues.

Al minuto 22 no había montaña imposible de escalar para el Madrid, que acabó entregando el liderato a una semana del ´clásico´. El parón por las selecciones enfriará las sensaciones, pero no podrá cambiar la tabla. El Barça, tras golear al Villarreal, es el nuevo líder de la Liga y visitará el Bernabéu subido en el pedestal.

Este domingo, el Sevilla mandó al limbo el equilibrio, el rigor y el orden. Todos ellos, cogidos de la mano, se fueron de paseo con las estadísticas que tanto enorgullecen a Benítez. Y cuando falta el fútbol los números no valen nada. Eso fue lo que le ocurrió al Madrid más conformista de los últimos tiempos.

Ramos aprovechó un córner para poner en ventaja a los suyos. El de Camas, que marcó a su exequipo, remató con un escorzo de delantero centro puro. En la caída, y tras quejarse en el hombro, fue sustituido ocho minutos después. Varane ocupó su sitio y el colchón apenas le duró un cuarto de hora a los merengues.

Un paso atrás, pérdida del control del centro del campo, y nula presencia de un Cristiano que estuvo desaparecido en la inmovilidad de su nueva ubicación. El mejor rematador de este deporte es intrascendente si no arranca desde la banda y aprovecha su velocidad para desequilibrar al rival. El único que lo hizo fue Isco y fue cambiado cuando había empezado a llover para los blancos en el Pizjuán.

Da igual que lo hagan bien o mal, la misma sensación que había con Ancelotti, Pellegrini o Mourinho porque Cristiano jugará siempre. Contra quien sea y donde sea. Y ahí, en la concepción de colectivo, lleva perdiendo el Madrid desde hace unos años. Nada importa tanto como que el ´crack´ de Madeira se vaya a casa contento con el balón bajo el brazo.

Al gol de Ramos contestó el italiano Ciro Inmobile, que marcó su primera diana con la camiseta del Sevilla tras la salida de un córner. Un balón sin dueño al segundo palo lo terminó por cruzar para impedimento de Kiko Casilla, que tampoco disfrutó de su mejor noche. El gol relanzó a los de Emery, que fueron a más en el segundo acto.

Ahí, directamente, no compareció el Real Madrid pese a sus tímidos lanzamientos desde fuera del área. Modric, que multiplicó esfuerzos sin éxito, y Casemiro, que lo intentó sin suerte, no dieron con la tecla en un escenario donde también perdió el Barça este curso (2-1). A la hora de partido, y tras una triangulación exquisita, el Sevilla dio el segundo mordisco al líder con un gol de Banega.

El argentino se coaligó con Konoplyanka, uno de los mejores del partido, y humanizó a este Real Madrid, que había recibido 4 goles en toda la Liga y hoy se llevó tres en la saca. Llorente, con un cabezazo de los suyos y que tanto echaban de menos en la capital andaluza, cerró la victoria del Sevilla con puñetazo incluido sobre la mesa.

El colombiano James, que volvió a jugar dos meses después, maquilló el marcador final con un zurdazo desde fuera del área (3-2), pero el tiempo ya estaba cumplido y poco más tenía que hacer un Madrid que se fue muy cabreado de Sevilla y deseando que llegue el clásico para sacarse la espina y recuperar el primer puesto. Los de Emery respiran mucho más tranquilos.