Este es el whatsapp que puso contra las cuerdas al futbolista Rubén Castro

El futbolista del Real Betis Balompié Rubén Castro, para quien la Fiscalía de Sevilla solicita cuatro años de cárcel por los malos tratos cometidos supuestamente sobre su expareja sentimental, aseguró este jueves que "jamás" le ha puesto "la mano encima" a la denunciante y atribuyó la denuncia a los "celos" de ella.

Durante su declaración en el juicio este jueves en el Juzgado de lo Penal número 14 el delantero del Betis puso de manifiesto que "nunca" ha maltratado, golpeado ni amenazado a su exnovia, a la que conoció cuando ella trabajaba de go-go en una discoteca de la capital hispalense y con la que mantuvo una relación sentimental de dos años entre 2011 y 2013.

De este modo, negó uno por uno los episodios de maltrato denunciados por su expareja y relató hasta dos ocasiones en las que ella arremetió contra él, en una de las cuales, desarrollada en una discoteca del parque María Luisa de Sevilla, ella le llegó a "agarrar del cuello", mientras que en otra ocasión la supuesta víctima se puso "muy furiosa y brava" y se montó en su vehículo "con intención de atropellarle".

El futbolista, para quien la acusación particular que ejerce ella reclama ocho años y nueve meses de prisión, aseguró que no estaba enamorado de su exnovia y que entre ellos únicamente existía "una profunda atracción sexual".

Castro también admitió, según informa Telecinco, que le mandó un mensaje de móvil en el que la amenazaba de muerte. “Eso espero porque si no es así te mato”, le dijo. El futbolista explicó que no pretendía matarla, sino que era una frase hecha. “Tenía un compañero en el equipo que todas las frases que decía las terminaba las frases con un ‘te mato’ y “se me pegó; Con todo me salía eso”, intentó argumentar.