Un whatsapp con el vídeo sexual acorrala a los tres futbolistas del Arandina

Cuando la sociedad está conmocionada por el juicio a La Manada por la presunta violación en grupo a una joven en Sanfermines un nuevo caso de presunta agresión sexual grupal se ha aupado a los titulares de los diarios deportivos.

Apenas un año después de que los jugadores del Eibar Sergio Enrich y Antonio Luna coparan titulares con un vídeo subido de tono que se filtró a redes manteniendo relaciones sexuales con una chica, otros tres futbolistas se han colocado en el ojo del huracán.

En este caso se trata de Lucho, Viti y Calvo, jugadores de la Arandina de la Tercera División, que fueron detenidos este lunes por un presunto delito sexual, según la SER. Los tres pasaron la noche en el calabozo tras la denuncia por presuntos abusos presentada por la víctima.

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía arrestaron en su propio domicilio de la capital arandina, a Carlos Cuadrado Santos, 'Lucho', y a Víctor Rodríguez Ramos, 'Viti', delantero y portero del club, respectivamente. Posteriormente, Raúl Calvo Hernández, también delantero y compañero de piso de los anteriores, era requerido en dependencias policiales, donde fue detenido horas más tarde tras presentarse voluntariamente.

Los hechos, que ocurrieron en la localidad burgalesa de Aranda de Duero donde viven los tres acusados, podrían haber sido grabados en un vídeo y difundidos por alguno de los denunciados a través de grupos de Whatsapp, según recoge la Agencia EFE. Ese vídeo ahora mismo podría estar fuera de control en las redes sociales con el agravante de que se trata de una menor de edad.

El País asegura que la denunciante es una joven de 15 años que estaba en tratamiento psicológico y que las actuaciones se iniciaron a raíz de una llamada de sus padres a la Fundación ANAR, una ONG que atiende a "menores y adolescentes en situación de desamparo". La chica acudía a Madrid con sus padres una vez a la semana a recibir tratamiento y en una de esas consultas fue donde manifestó que tres jugadores del Arandina le propusieron tener relaciones y la invitaron a su piso de Aranda de Duero: "Una vez allí no quiso seguir con la propuesta y la forzaron".

Fuentes cercanas apuntan que "ella dice que se sometió para evitar males mayores".

Por su parte, el club ha remitido un comunicado en el que afirma que las detenciones "no tienen nada que ver con motivos futbolísticos ni del club" y manifiesta su máximo respeto a la Justicia.