Trump se habrá perdido el reinicio de la NBA, alineada con el Black Lives Matter
Después de cuatro meses y medio de parón por el coronavirus, la NBA se reanudó con las esperadas protestas de los jugadores por la muerte de George Floyd a manos de la Policía.
Jugadores de los Lakers escuchan, de rodillas y con camiseta de Black Lives Matter, el himno estadounidense.
Se supone que Donald Trump no vería ayer la reanudación de la NBA. El presidente de los Estados Unidos ya anunció que si los jugadores realizaban algún tipo de reivindicación contra el racismo y se alineaban con la campaña Black Lives Matter, él apagaría la televisión. Se supone que así habrá sido.
Y eso que la señal oficial de la NBA no emitió los prolegómenos de los dos encuentros con los que ayer se reanudó la liga norteamericana de baloncesto después de cuatro meses y medio de parón debido al coronavirus.
Pero una simple búsqueda por las redes sociales proporcionaba lo esperado, por más que Estados Unidos se quedara, en principio, sin verlo. Todos los jugadores de los Lakers y los Clippers, que protagonizaban el derbi angelino en el regreso de la competición, hincaron rodilla en tierra cuando sonó el himno estodounidense que, por cierto, sirve de prólogo a todos los encuentros de la NBA, a excepción, claro, de los que se disputan en Toronto, donde suena el canadiense.
Todos los protagonistas del partido, en sus banquillos, de rodillas como homenaje a George Floyd, el hombre negro que murió a causa de una salvaje actuación policial. El lema con el que más de medio Estados Unidos se ha levantado como protesta, el ya inmortal Black Lives Matter, se pudo ver en las camisetas de todos los jugadores. Todo una demostración de combate y solidaridad.
En lo meramente deportivo, los Lakers de LeBron James y Anthony Davis se impusieron a los Clippers de Kawhi Leonard y Paul George por 103-101. Antes, en el primer encuentro de la reanudación, los Jazz vencieron a los Pelicans de Zion Williamson por otro ajustadísimo 106-104.
La competición, que se desarrolla en la burbuja instalada en Orlando, ya no parará, con multitud de partidos diarios, hasta que concluya allá por el próximo 13 de octubre.