El partido perfecto de Simeone: horrible primera parte, fantástico en la segunda
Como ha sucedido tantas veces desde que llegó Simeone, el Atleti gana un partido tras tirar la primera parte y convencer de manera notable en una gran reanudación.
Trescientas veces habíamos visto este partido del Atleti de Simeone. 301. El club rojiblanco acaba de ganar al Betis (2-0) después de una primera parte lamentable y un segundo tiempo más que notable. Parece ciencia ficción pensar que Simeone juega a eso, a aburrir y desesperar a sus propios seguidores en los primeros periodos para acabar con el equipo contrario en la reanudación, pero le ha salido tantas veces, que va a ser que sí.
Ya desagradó el Cholo desde la alineación titular. No jugó de inicio Joao Félix y Simeone dio la enésima oportunidad al francés Lemar. El galo no dio una a derechas y el técnico argentino estuvo muy benévolo con él dejándole jugar 45 minutos. Lemar fue, con Trippier, lo peor de una primera parte rojiblanca para olvidar. Lo del inglés es de juzgado de guardia y no vio en todo el partido ni a Tello ni a Álex Moreno.
El Betis jugó mejor al fútbol en esta primera parte, pero su dominio fue más de posesión que de otra cosa. Oblak tuvo un par de actuaciones notables, un cabezazo de Carvalho y un muy buen disparo de Fekir, pero lo curioso es que las dos mejores ocasiones fueron para Luis Suárez. El uruguayo falló lo que no suele y el partido se fue al descanso con los peores augurios para el equipo rojiblanco.
Pero como todo estaba planeado, Simeone actuó en los mismos vestuarios, quitando del campo al inoperante Lemar y al insípido Torreira y dando entrada a Herrera y a Carrasco. Y el equipo tuvo otra cara desde la primera jugada.
Solo habían pasado 17 segundos cuando Marcos Llorente consiguió el primer gol rojiblanco al aprovechar, con maestría, que Claudio Bravo se venció hacia un lado dejando su palo. Llorente aprovechó el regalo del portero chileno y le batió sin remisión.
Al momento salió Joao Félix al campo y todo siguió fluyendo hasta conseguir una sobresaliente superioridad rojiblanco, realmente impensable viendo la primera parte, salvo, claro, en la preclara mente de Simeone. Herrera mandó un disparo fantástico al poste de Bravo, Carrasco hizo lo mismo con el larguero y el Atlético empezó a errar ocasiones, que bien le hacían merecedor de una ventaja mucho más amplia.
Además, el Atleti jugó los últimos 20 minutos con un hombre más por expulsión de Montoya, que derribó a Carrasco cuando se iba solo de cara a portería después de un fantástico centro de Joao Felix. El propio delantero belga falló un mano a mano ante Bravo. Total, que el Atleti empezó a desaprovechar ocasiones que le podían dificultar la victoria.
Pero en el minuto 90, Luis Suárez no perdonó la enésima contra clara del Atlético y dejó al club rojiblanco segundo en la clasificación, como único invicto, con solo un gol encajado y con dos partidos menos. La nota negativa del encuentro fue la lesión muscular de Carrasco, que se perderá varios de los complicados partidos que vienen ahora, el Salzburgo en Champions el martes, para empezar.