«Una parte del Real Madrid nunca creyó en mí»
El guardameta Keylor Navas, pieza clave en el tricampeón de Champions, reconoce desde París que no todo el mundo le ayudó a triunfar en el Real Madrid y a ser reconocido en el club.
A pesar de no tener el renombre y el protagonismo de otras figuras clave en la obtención de las últimas tres Champions consecutivas del Madrid, como Cristiano Ronaldo, Sergio Ramos o Gareth Bale, la presencia del costarricense Keylor Navas bajo los tres palos fue vital para el equipo dirigido por Zinedine Zidane.
En la actualidad milita en el Paris Saint-Germain y recientemente ha ofrecido unas jugosas declaraciones para la revista del club francés en las que ha recordado parte de su experiencia defendiendo el arco merengue. Sin embargo, ha advertido que no fue del todo positiva, especialmente por la escasa o nula confianza que un sector del club había depositado en él.
No obstante, el centroamericano supo consolidarse en una portería que parecía propiedad de Iker Casillas: «Cuando llegué al Madrid no traté de demostrar que era mejor que Iker y que mi carrera sería más exitosa que la suya. Simplemente intenté aprovechar la oportunidad que me dieron de trabajar duro, con humildad y haciéndolo lo mejor posible».
De igual manera, manifestó su agradecimiento por el apoyo que aún recibe por parte del madridismo: «Siempre estaré agradecido a la afición del Real Madrid por el apoyo incondicional que me mostraron y que me muestran todavía a pesar de haber cambiado de equipo y mis compañeros en el Madrid también creyeron siempre en mí», aunque advierte que siempre tuvo la sensación de que un sector del club, posiblemente parte del cuerpo técnico o de la directiva, no confiaba plenamente en él.
Afirma sentirse mejor en París
Sobre su experiencia en el PSG ha indicado que «las cosas son diferentes» y cuenta con el aprecio de la afición, a la que intenta retribuir con resultados sobre el césped. Relató también el momento agridulce que vivió el año pasado, cuando los parisinos estuvieron muy cerca de conquistar su primera Champions: «Vivimos una experiencia maravillosa en la fase final de Lisboa y al final nos fuimos muy tristes por no lograr el objetivo de ganar la final, pero aprendimos mucho de aquello».
El guardameta llegó a Valdebebas en el verano de 2014 desde el Levante tras una brillante participación en el Mundial de Brasil, donde los ticos fueron emparejados en el «grupo de la muerte» junto a Italia, Inglaterra y Uruguay. Muy pocos creyeron en la clasificación de Costa Rica a la siguiente fase.
Sin embargo, los dirigidos por Jorge Luis Pinto vencieron a Uruguay, Italia y empataron ante Inglaterra, lo que les permitió avanzar a los octavos de final, donde echaron a Grecia por penaltis, aunque caerían por la misma vía frente al seleccionado de los Países Bajos, que terminó tercero en el torneo.